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Yemen: los civiles huyen de la escalada de la violencia

19-08-2009 Entrevista

En Yemen, hay miles de personas desplazadas. La situación humanitaria se ha deteriorado en los últimos días debido a la reanudación de los enfrentamientos en las gobernaciones de Saada y Amran. El jefe de la delegación del CICR en Yemen, Jean-Nicolas Marti, describe lo que está sucediendo a las personas que han tenido que desplazarse.

     

 
   
Jean Nicolas Marti, jefe de la delegación en Yemen. 
         

  ¿Qué situación se está viviendo actualmente en Saada y otras zonas afectadas por los enfrentamientos en el norte de Yemen?  

     

Los enfrentamientos armados se han intensificado en los últimos dos meses y continúan ahora. Miles de personas se han ido del lugar para buscar refugio en la ciudad de Saada y las zonas aledañas. En Amran (Harf Sufyan) cientos de personas también han tenido que desplazarse por los enfrentamientos: ahora están esparcidas por toda la gobernación. Esas personas desplazadas probablemente no hayan podido llevarse sus pertenencias, por eso creemos que necesitan ayuda con urgencia. El CICR aún no cuenta con cifras precisas sobre las personas desplazadas. Nuestro acceso a las zonas más afectadas es limitad o ahora, pero aprovecharemos todas las oportunidades que se presenten para prestar asistencia humanitaria cuando la situación nos permita movernos en condiciones de seguridad.

     

     
   
El CICR, junto con la Media Luna Roja de Yemen, presta asistencia a las personas afectadas por los enfrentamientos en el norte del país; en particular, les brinda atención médica y les entrega artículos básicos y agua potable.

    A través de su servicio de búsqueda de personas, el CICR  ayuda a restablecer el contacto entre los solicitantes de asilo y los refugiados y sus parientes que han vuelto a su lugar de origen; permite que familias yemenitas mantengan el contacto con sus familiares detenidos en el exterior. El CICR ha visitado a dos detenidos que fueron trasladados de la bahía de Guantánamo a Yemen y espera reanudar las visitas a los detenidos en todos los centros de detención del país.

    El CICR promueve el conocimiento del derecho internacional humanitario, su integración en la legislación nacional y su incorporación en los programas de enseñanza de escuelas y universidades, así como en los programas de entrenamiento de las fuerzas armadas y policiales.

    El CICR realizó actividades por primera vez en Yemen durante la guerra civil de la década de 1960. Actualmente, tiene una plantilla de 117 colaboradores en todo el país: 20 expatriados y 52 colaboradores nacionales en Sana, así como 5 expatriados y 40 colaboradores nacionales en la subdelegación de Saada, en el norte de Yemen.      
          Se ha informado que muchas personas han huido de sus hogares. ¿Cuáles son sus necesidades ahora?  

 

El CICR está muy preocupado por la situación de los civiles afectados por los enfrentamiento s en las gobernaciones de Saada y de Amran. Instamos a las partes en los enfrentamientos a que tomen todas las medidas necesarias para preservar la vida y los bienes de la población civil.

 

Hasta ahora, miles de familias han llegado a la ciudad de Saada. Están buscando un lugar seguro donde quedarse. Sus necesidades más inmediatas son refugio, agua, alimentos y acceso a la atención médica. El CICR, en estrecha cooperación con la Media Luna Roja de Yemen, ha estado administrando varios campamentos para personas desplazadas en la ciudad de Saada en los últimos años. Varias familias recientemente desplazadas han llegado a esos campamentos. Hemos entregado insumos médicos a algunos campamentos y a la clínica de la Media Luna Roja de Yemen que atiende a los desplazados. Además, entregamos agua potable a diario. Hemos distribuido también 100 carpas a las personas que acaban de llegar a los campamentos.

 

Dado el alto número de personas que han tenido que desplazarse recientemente, también estamos por reabrir un campamento que se cerró el año pasado, a fin de alojar a unas 2.800 personas más. En las gobernaciones de Amran y Hajjah, en el noroeste de Sana, el CICR y la Media Luna Roja de Yemen están evaluando las necesidades de la población. En los próximos días hemos previsto realizar una distribución de emergencia de agua potable y de otros artículos básicos.

 

  El CICR y la Media Luna Roja de Yemen también prestan asistencia en campamentos para desplazados en la gobernación de Saada. ¿Han podido llegar hasta allí en la última semana?  

     

El acceso a los campamentos en la ciudad de Saada no ha sido un problema para el CICR y la Media Luna Roja de Yemen. Sin embargo, hemos tenido algunos problemas en llegar a los campamentos ubicados fuera de la ciudad.

 

  Se ha informado que quince voluntarios de la Media Luna Roja de Yemen fueron secuestrados la semana pasada. ¿El personal del CICR ha tenido problemas de seguridad?  

     

Realmente nos alegra mucho poder decir que los voluntarios de la Media Luna Roja fueron liberados y están sanos y salvos. La situación actual en esa parte de Yemen es muy inestable. Desde que nueve extranjeros fueron secuestrados hace dos meses y tres de ellos fueron ejecutados, los movimientos del CICR, sobre todo de su personal expatriado, han sido bastante limitados. El CICR y la Media Luna Roja de Yemen están tomando todas las precauciones posibles para garantizar que su personal pueda trabajar en condiciones de seguridad. Para ello, han recordado a las partes en los enfrenamientos armados que deben respetar a los trabajadores humanitarios y permitir que las personas que llevan el emblema de la media luna roja accedan en condiciones de seguridad a las víctimas de la violencia.

 

  ¿Qué ha estado haciendo el CICR para las personas afectadas por los enfrentamientos en el norte en los últimos años?  

     

El CICR trabaja en el norte de Yemen desde 2004. En cooperación con la Media Luna Roja de Yemen, ha estado ayudando a la población a afrontar los efectos de las hostilidades. Además de nuestras otras actividades, ahora estamos suministrando agua potable y artículos domésticos esenciales a las personas más afectadas, prestamos apoyo a varios centros médicos, incluidos los que funcionan en los campamentos para desplazados en la ciudad de Saada.