La Institución implementó respuestas humanitarias a gran escala con su socio operacional, la Cruz Roja de Filipinas, para asistir a los sobrevivientes de las sucesivas emergencias, mientras mantiene sus actividades habituales de ayuda a los detenidos y a las comunidades afectadas por el conflicto armado.

Respuesta ante el tifón Haiyan

 

El CICR y la Cruz Roja de Filipinas instalan sistemas de distribución de emergencia para suministrar agua potable a las personas desplazadas como consecuencia del conflicto armado y el desastre natural.
© CICR / B. Goris

Desde principios de noviembre de 2013, cuando el tifón Haiyan barrió  aldeas enteras, causó la separación de numerosas  familias, se cobró miles de vidas y privó a los pobladores de sus medios de sustento, el CICR y la Cruz Roja de Filipinas han respondido a las necesidades en la Isla Samar.

Ambas instituciones continúan con las distribuciones de raciones de alimentos, en tanto han puesto en marcha programas de recuperación temprana tendientes a reconstruir los medios de sustento, brindar alojamiento y reparar los daños en la infraestructura sanitaria y los sistemas de suministro de agua.

Asistencia de emergencia

• Se entregaron raciones de alimentos para medio mes y artículos domésticos a más de 163.000 personas, así como raciones de alimentos para tres días a cerca de 60.000 personas;
• se suministró agua, alimentos, insumos médicos y lonas impermeables a los centros de detención afectados.

Mejoras en el acceso al agua potable

• Se distribuyó agua potable a más de 85.000 personas mediante plantas de tratamiento de agua;
• se reparó la red de agua de Guiuan, que benefició a 32.000 personas; se impartió formación y se dio apoyo técnico al personal de la empresa de distribución de agua del distrito de Guiuan.

Apoyo a la asistencia de salud

• Se instalaron centros de salud para emergencias en dos municipios, en colaboración con las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja Noruega y Finlandesa; se atendieron más de 6.600 consultas de pacientes ambulatorios y se practicaron 180 cirugías y 90 partos;
• se proporcionó asistencia médica para cuatro hospitales, siete unidades de salud rurales y 50 centros de salud de barangay (centros barriales) y se repararon seis unidades de salud rurales, dos hospitales de distrito y 32 centros de salud de barangay.

Restablecimiento del contacto entre familiares

• Se creó el sitio Web de restablecimiento del contacto entre familiares (familylinks.icrc.org), que recibió consultas de más de 50.000 personas;
• se ayudó a 120 detenidos a tomar contacto con sus familiares a través de los mensajes de Cruz Roja y llamadas telefónicas por satélite.

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Respuesta ante el tifón Bopha

 

En las zonas ya afectadas por décadas de conflicto armado, el CICR ayuda a reconstruir viviendas que han quedado totalmente destruidas por los desastres naturales.
© CICR / S. Velasco

En diciembre de 2012, más de 1.800 personas murieron o fueron dadas por desaparecidas, en tanto más de 900 resultaron heridas cuando el tifón Bopha asoló Mindanao Oriental,  región afectada por el conflicto. En el transcurso de los doce meses posteriores, el CICR y la Cruz Roja de Filipinas implementaron una respuesta integral para ayudar a los sobrevivientes del tifón en las zonas  más afectadas de Davao Oriental y el valle de Compostela.

Asistencia de emergencia

• Se entregaron alimentos para más de 288.000 personas, así como artículos domésticos y de higiene a más de 282.000 personas;
• se suministró agua potable para alrededor de 18.000 personas en Davao Oriental;
• se distribuyeron más de 53.000 lonas impermeables y 4.500 conjuntos de herramientas durante la fase de emergencia.

Apoyo para recuperar los medios de sustento

• Se implementaron proyectos de dinero por trabajo para cerca de 78.000 personas;
• se donaron semillas (hortalizas, maíz y pimentón) para alrededor de 402.000 personas;
• se proporcionó ayuda económica en efectivo a cerca de 400 pescadores y agricultores.

Apoyo a la asistencia de salud

• Se instaló una unidad de atención primaria de salud en Davao Oriental, con el apoyo de la Cruz Roja Japonesa, que benefició a más de 60.000 personas;
• se proporcionaron insumos médicos a dos hospitales, cinco unidades de salud rurales y un puesto de salud transitorio.

Infraestructura

• Se construyeron más de 3.000 albergues permanentes para las familias más vulnerables;
• se impartió formación sobre mejores prácticas en técnicas de construcción para cerca de 49.000 personas;
• se ayudó a reparar o se repararon 18 centros de salud dañados;
• se brindó apoyo para restablecer la asistencia de salud en un hospital de distrito en Davao Oriental;
• se restauraron 14 sistemas de redes de suministro de agua dañados, que beneficiaron a más de 12.000 personas.

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Respuesta ante el conflicto en Zamboanga

 

El CICR trabaja para mejorar el acceso de las personas desplazadas al agua potable y al saneamiento.
© CICR / J. Maitem

En septiembre de 2013, se produjeron enfrentamientos en la ciudad de Zamboanga en Mindanao Occidental entre los miembros del Frente Moro de Liberación Nacional y las tropas del Gobierno. Los enfrentamientos, de tres semanas de duración, causaron diversas víctimas y obligaron a más de 100.000 personas a abandonar sus hogares. Más de 10.000 edificios resultaron dañados o incendiados.

En el inicio de la crisis, el CICR y la Cruz Roja de Filipinas llevaron a cabo operaciones de socorro y garantizaron el acceso de las familias desplazadas al agua potable y a la asistencia médica de emergencia. La asistencia continúa y muchas familias se esfuerzan por recuperarse. El CICR también visitó cerca de 300 personas detenidas en relación con las hostilidades.

Asistencia de emergencia

• Se proporcionó comida caliente a 146.000 personas desplazadas, así como alimentos, artículos para el hogar y de higiene personal a más de 16.500 familias desplazadas;
• se instalaron 11 tanques flexibles para el suministro de agua potable a 78.000 personas;
• se instalaron 78 letrinas en dos centros de evacuación;
• se proporcionó ropa y artículos de higiene a personas detenidas como consecuencia de las hostilidades.

Apoyo para recuperar los medios de sustento

• Se implementaron programas de dinero por trabajo (limpieza de centros de evacuación y construcción de tiendas comunales) para unas 6.000 personas desplazadas;
• Se proporcionó asistencia financiera a más de 25.000 personas.

Apoyo a la asistencia de salud

• Se asistió a cerca de 19.000 personas a través del establecimiento de atención básica de salud;
• se llevó a cabo un estudio nutricional en el grupo de menores de 5 años;
• se atendió a  60 detenidos heridos y se donaron insumos médicos a las autoridades.

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Actividades habituales

 

El CICR apoya a la Fundación Jubilee en Davao, que beneficia a las personas con amputaciones y pacientes con discapacidades físicas como consecuencia de la violencia armada.
© CICR / A. Madrazo

En Filipinas, donde el CICR trabaja desde hace más de 60 años, la delegación concentra su respuesta humanitaria en las zonas aisladas del país que padecen las consecuencias, a menudo crónicas, de los largos conflictos armados. Según las necesidades de las comunidades afectadas, el CICR lleva a cabo una serie de actividades humanitarias integradas, que abarcan acceso al agua, apoyo a los medios de sustento y asistencia de salud.

Las actividades del CICR en los centros de detención son el eje de su trabajo en el país. Brinda apoyo a las autoridades para garantizar que los detenidos reciban un trato adecuado y para abordar las causas y las consecuencias del hacinamiento.

Apoyo para mejorar las condiciones de detención

• Se brindó asistencia a 28 cárceles y centros de detención en la mejora de la asistencia de salud para 38.000 personas detenidas;
• se intensificó el programa de control de tuberculosis y se brindó tratamiento de calidad a cerca de 600 pacientes con tuberculosis en dos centros de detención;
• se brindó apoyo en la construcción de una clínica y un laboratorio en la prisión New Bilibid, así como una clínica médica y odontológica en la cárcel de la ciudad de Quezón, que benefician a más de 25.000 detenidos;
• se reformaron 14 cárceles para mejorar las condiciones de vida de más de 8.000 detenidos.

Apoyo a la asistencia de salud

• Se proporcionaron materiales para apósitos y medicamentos básicos a 23 hospitales en las zonas propensas a conflictos;
• se construyó una clínica de fisioterapia en el centro de rehabilitación física de la Fundación Jubilee en Davao, que atendió a más de 200 pacientes y proveyó 72 miembros protéticos y material ortopédico.

Mejoras en el acceso al agua potable

• Se construyó una red de suministro de agua de 33 kilómetros para 15.000 personas y un sistema de abastecimiento de agua con energía solar para 700 personas en Cotabato del Norte;
• se reparó un sistema comunitario de suministro de agua en Surigao del Sur para 500 personas;
• se construyó un sistema de abastecimiento de agua que funciona por  gravedad en Negros Occidental para 1.800 personas.

Apoyo para recuperar los medios de sustento

• Se donaron semillas y fertilizantes a más de 15.000 personas en las comunidades afectadas por el conflicto en Negros Occidental y Cotabato del Norte;}
• se construyeron molinos de maíz para casi 3.000 personas en Cotabato del Norte y Surigao del Sur para ayudar a reducir los gastos;
• se ayudó en la instalación de una fábrica de procesamiento de coco para 2.500 personas en el archipiélago de Sulu;
• se proporcionó apoyo veterinario en la atención de los carabaos (búfalos de agua) distribuidos previamente en Cotabato del Norte;
• se impartieron cursos de formación sobre técnicas de agricultura y cría de animales para más de 2.200 personas.

Apoyo ante emergencias

• Se distribuyeron alimentos, artículos para el hogar y de higiene a más de 20.000 personas desplazadas afectadas por los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los grupos armados en junio y octubre;
• se distribuyeron alimentos y artículos de higiene a los repatriados/deportados del estado de Sabah y a las personas afectadas por las inundaciones de agosto en Maguindanao y el terremoto en Cotabato del Norte en junio.

Promoción del derecho internacional humanitario (DIH)

• Se organizaron sesiones de formación y talleres sobre derecho internacional humanitario destinados a grupos de la sociedad civil, personal de las fuerzas armadas y de la policía personal y funcionarios gubernamentales;
• se brindó asesoramiento técnico que condujo a la promulgación de la Ley de la República 10530 o Ley del emblema;
• se organizó la Competencia anual de tribunales simulados de DIH para estudiantes de derecho;
• se profundizó el diálogo con los medios de comunicación a través de un Premio de la Cruz Roja por informes humanitarios.

Apoyo a la Sociedad Nacional de la Cruz Roja

• Se brindó apoyo para el fortalecimiento de las capacidades de más de 300 voluntarios de 22 filiales prioritarias de la Cruz Roja de Filipinas en zonas consideradas  propensas a sufrir las consecuencias de los desastres naturales, la violencia o  el conflicto armado.

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