Afganistán: el sufrimiento de las personas civiles aún es desmesurado

Afganistán: el sufrimiento de las personas civiles aún es desmesurado

Kabul (CICR) – Mientras las comunidades en Afganistán celebran Eid al-Adha, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) se desanima al observar que la intensidad de la violencia y sus consecuencias en las personas civiles persisten pese a las conversaciones de paz en curso.
Comunicado de prensa 12 agosto 2019 Afganistán

El número de víctimas civiles es aún demasiado elevado en Afganistán: los datos de 2019 llevan a inferir que todas las partes en el conflicto —en su totalidad— deben realizar mayores esfuerzos para evitar que, día tras día, haya nuevas lesiones y muertes en la población afgana.

Los bombardeos aéreos, las redadas nocturnas y los ataques realizados en zonas rurales y pobladas provocan la muerte y la mutilación de mujeres, hombres y niños que no participaron en los enfrentamientos. Hogares, mezquitas, escuelas, mercados y centros de asistencia de salud se ven afectados.

"Se presta muy poca atención al sufrimiento de los civiles. Deben ser protegidos y respetados en todo momento", dijo el jefe de delegación del CICR en Afganistán, Juan-Pedro Schaerer.

Los profesionales médicos también deben ser protegidos y respetados por todas las partes. La cantidad de ataques contra prestadores de asistencia de salud e instalaciones sanitarias es desmesurada: 59 incidentes en la primera mitad de 2019. Todas las partes deben permitir a los pacientes el acceso irrestricto a los servicios de salud, independientemente de su afiliación.

"Atacar a un solo médico o enfermero socava la asistencia de salud vital para todas las personas. Esto debe cesar", afirmó Schaerer.

El CICR también está sumamente preocupado por la situación de las personas detenidas por todas las partes en relación con el conflicto, independientemente de la parte a cargo de la detención. Los detenidos deben tener acceso a la asistencia de salud, a elementos básicos como agua potable, ropa y artículos de higiene, así como al contacto con sus familiares.

Aunque las necesidades humanitarias se intensifican cada vez más, la situación en materia de seguridad aumenta las dificultades para que la asistencia llegue a quienes necesitan alimentos, agua, refugio y seguridad. Este año, en relación con los últimos años, se ha registrado la mayor cantidad de incidentes que afectaron a trabajadores humanitarios. En abril, el CICR se vio obligado a interrumpir algunas actividades, incluida la asistencia a los heridos en lugares de difícil acceso; facilitar el traslado de pacientes heridos en la guerra; facilitar el traslado de los restos de personas fallecidas en el campo de batalla para la entrega a sus familiares; así como visitar a las personas detenidas y facilitar tanto visitas como llamadas telefónicas de sus familiares.

El CICR sigue determinado a continuar su labor en Afganistán, pero requiere acceso sin trabas para suministrar la asistencia humanitaria que, con urgencia, necesitan las personas afectadas por el conflicto armado. En virtud del derecho internacional humanitario, las partes en conflicto deben permitir y facilitar el paso rápido y sin trabas de la ayuda humanitaria destinada a las personas civiles necesitadas, una actividad de naturaleza imparcial.

"Incluso mientras continúan las conversaciones entre los diversos actores, todas las partes en el conflicto deben esforzarse más para proteger a la población civil, los bienes civiles, el personal médico y las instalaciones médicas", afirmó Schaerer. "Las medidas adoptadas actualmente para resguardar a la población civil y la infraestructura civil no son suficientes".

Para más información:
Robin Waudo, CICR Kabul, +93729140510
Roya Musawi, CICR Kabul, +93794618908
Najum Iqbal, CICR Ginebra, +41795740636