La crisis humanitaria en Líbano y la respuesta del CICR

Algunas de las actividades principales:

Socorros para las personas internamente desplazadas

Ante la situación de miles de familias desplazadas que buscan un lugar donde alojarse, el CICR se ha centrado en proporcionar los artículos de socorro más básicos para asistir a esa población vulnerable. Entre el 17 de septiembre y el 1 de noviembre de 2024, distribuimos 39.700 mantas y 19.000 colchones para personas desplazadas en todo Líbano, artículos que ofrecen algo de comodidad y dignidad a las familias que han tenido que dejar atrás su vivienda y sus pertenencias. Además, nuestros equipos entregaron 81.600 paquetes de artículos de aseo, 76.000 paquetes de alimentos y 16.500 juegos de cocina para ayudar a las personas a mantener cierto grado de autosuficiencia en la preparación de comidas para sus familiares.

Apoyo a instalaciones de salud vitales

El sistema de salud de Líbano se ha visto inmensamente sobrecargado, y los hospitales y centros de salud carecen del combustible, los insumos y el equipamiento médico que necesitan. En vista de la situación, el CICR ha distribuido 186.800 litros de combustible entre diversas instalaciones de salud para evitar interrupciones en la prestación de servicios esenciales. Además, hemos distribuido 300 dispositivos de apoyo para la movilidad entre los centros de rehabilitación física para asistir a las personas con movilidad reducida y mantener en curso los servicios de rehabilitación.

Para atender necesidades médicas urgentes, el CICR ha entregado seis paquetes de suministros que permiten el tratamiento hospitalario de 300 pacientes con heridas por armas de fuego. También se entregaron medicamentos e insumos médicos en 29 centros de atención primaria de la salud y 23 hospitales para aliviar la escasez y contribuir a la continuidad de los tratamientos. Además, hemos proporcionado material sanitario a 11 centros de atención médica de emergencia a fin de que el personal de primera línea disponga de los recursos necesarios para brindar atención sin demoras.

Mejora del acceso al agua potable 

La situación actual ha dado lugar a nuevas dificultades para mantener el acceso a agua potable, sobre todo en zonas con una alta concentración de personas desplazadas. A fin de atender este problema, el CICR ha proporcionado más de 100.000 litros de combustible, instalado seis bombas nuevas y puesto en marcha dos generadores móviles para sostener el funcionamiento de la infraestructura y los sistemas hídricos. Estas iniciativas han ayudado a mejorar el acceso a agua potable de casi 300.000 personas, una diferencia que puede ser crucial para la situación general de salud pública.

Mejora de las condiciones de vida de las personas detenidas

Además de apoyar a las poblaciones desplazadas y las instalaciones de atención de salud, el CICR viene trabajando activamente para mejorar las condiciones de vida de las personas detenidas en Líbano. En ocho lugares de detención, hemos realizado tareas de mantenimiento y reparaciones de los generadores para sostener la prestación de servicios básicos como la iluminación y la ventilación. Estas mejoras han permitido que 5.150 personas detenidas gocen de condiciones de vida más humanas.

Próximos pasos

El CICR está comprometido a prestar asistencia permanente en Líbano y a recordarles a las partes en el conflicto cuáles son sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario. Seguimos observando la situación de cerca y dedicándonos a prestar asistencia vital en todo el país. Llamamos a la comunidad internacional a acompañar a Líbano y a apoyar los esfuerzos por aliviar el inmenso sufrimiento de las personas afectadas por el conflicto armado.