"En los últimos 13 años, el CICR ha registrado 35.000 casos de personas desaparecidas en Siria.
Por cada uno de ellos, hay una familia y un dolor insoportable que solo empeora con los años. Durante este tiempo, nunca dejamos de trabajar en la búsqueda de respuestas para los familiares sobre lo ocurrido a sus seres queridos. Su derecho a saber la verdad siempre ha sido nuestra prioridad, y continúa siéndolo.
Esta semana, al abrirse las cárceles para liberar a las personas detenidas, los familiares vivieron un duro momento emocional, cargado de esperanza y a la vez de angustia, rabia y frustración.
El martes fuimos con mi equipo a la cárcel de Sednaya por primera vez y vimos a cientos de personas esperando afuera. Hablé con una mujer mayor que estaba allí desde las 7 de la mañana, desesperada por obtener algún dato sobre su hijo, desaparecido hace más de 10 años.
Dentro de la cárcel, había muchísimos documentos estropeados esparcidos en diferentes lugares. Estos registros pueden contener información crucial que ayudaría a los familiares a obtener las respuestas que tanto esperan. Dejamos los documentos bajo la custodia de quienes están a cargo de la seguridad de la cárcel.
Es por ese motivo que el CICR pide con urgencia a todas las partes en Siria que eviten la destrucción de documentación importante, como registros de arrestos, listados de personas detenidas o fallecidas, y registros judiciales y hospitalarios.
Los hechos de la semana pasada se desarrollaron muy rápidamente, pero aprovechamos cada oportunidad para apoyar a exdetenidos y a quienes buscan a sus seres queridos desaparecidos. A principios de esta semana, habilitamos líneas de atención telefónica para las personas detenidas liberadas y los familiares que intentaban reencontrarse con los suyos.
Con fundamento en la larga experiencia del CICR, hicimos el ofrecimiento inmediato de ayudar a todas las partes que ejercen autoridad en Siria a localizar a las personas desaparecidas. Esta asistencia incluye apoyo técnico para preservar registros, proteger lugares de entierro y datos personales, y para que las prácticas forenses profesionales se ejecuten de conformidad con los estándares internacionales correspondientes. Asimismo, estamos a disposición para actuar como intermediario neutral a fin de facilitar búsquedas e identificaciones.
En paralelo, continuaremos ayudando —mediante apoyo en salud mental, asistencia médica, ayuda económica y en materia jurídica y administrativa— a las personas detenidas liberadas y a familiares de personas desaparecidas a atender sus necesidades más urgentes. Esta semana, por ejemplo, distribuimos insumos médicos a dos hospitales en Damasco para la atención de los heridos y exdetenidos.
También hemos ofrecido a las partes en el conflicto visitar a las personas que hayan detenido.
Desde el inicio del conflicto armado, el CICR nunca dejó de solicitar acceso a todos los lugares de detención en Siria. Las imágenes que vimos esta semana ilustran la importancia de obtener ese acceso a fin de evitar algunas de las peores formas de sufrimiento humano en Siria u otros lugares del mundo".