Asistencia de salud en peligro: un hospital no es solo un edificio

Un hospital no es solo un edificio. Protegerlo no consiste solo en erigir vallas a su alrededor e instalar ventanas antibalas. La seguridad y el bienestar del personal, tanto físicos como mentales, son también esenciales para garantizar el funcionamiento de las instalaciones de salud.

Este fue el mensaje claro de los expertos internacionales que se reunieron en dos talleres en Ottawa (en septiembre de 2013) y Pretoria (en abril de 2014) para debatir la seguridad de las instalaciones de salud en el marco del proyecto Asistencia de salud en peligro.

Los talleres generaron diversas recomendaciones y medidas, ahora recopiladas y explicadas en la publicación "Garantizar la preparación y la seguridad de las instalaciones de salud en conflictos armados y otras situaciones de emergencia" del proyecto Asistencia de salud en peligro. Esa publicación promueve un enfoque holístico para la protección de las instalaciones de salud, en el que la infraestructura, el personal y la cadena de suministro de bienes y equipos son todos elementos esenciales y en el que se tienen en cuenta los siguientes aspectos:

• La relevancia de los planes de contingencia para reducir el riesgo de que se interrumpa el servicio.
• La necesidad de realizar evaluaciones de riesgos para identificar el nivel de vulnerabilidad y los tipos de riesgos.
• La importancia de evaluar la influencia que pueden tener las medidas de seguridad físicas en la accesibilidad de las instalaciones y la percepción de la comunidad.
• La adopción de una dimensión doble en la protección del personal, que abarque su bienestar tanto físico como mental.
• La interconexión de los servicios de primera necesidad, como el agua, la electricidad y el combustible, que deben preservarse para garantizar el funcionamiento de las instalaciones de salud.

Proyecto Asistencia de salud en peligro

Asistencia de salud en peligro es un proyecto del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja para mejorar la seguridad del acceso a la atención de salud y de la prestación de ese servicio en conflictos y otras situaciones de emergencia. El proyecto exhorta a respetar al personal médico, las instalaciones de salud y los vehículos sanitarios, a la vez que impulsa la aplicación de una serie de recomendaciones y medidas prácticas para la protección de la asistencia de salud.