Colombia, vivir en medio del conflicto: temporada 3, episodio 2 - "Escuchar y dignificar a las víctimas de los conflictos armados en Colombia"
Los episodios se estrenarán individualmente cada 15 días y se podrán leer en nuestra página web.
Narrar las historias de los conflictos armados y la violencia en territorio colombiano a través de los testimonios de las víctimas no es una tarea fácil. Escucha en este nuevo episodio de nuestro podcast a Gloria Castrillón directora de Colombia +20 formato periodístico de El Espectador.
Escribir puede ser una acción sencilla de hacer. Sin embargo, narrar las historias de los conflictos armados y la violencia en territorio colombiano, escuchar a las víctimas, comprenderlas en su entorno y ver que resistir significa en el día a día salir y seguir haciendo su trabajo pese a que todas las condiciones estén en contra, es todo un reto. Gloria Castrillón nos cuenta su labor en el cubrimiento periodístico de tantas situaciones que viven los colombianos en las zonas rurales del país y la dignificación de las víctimas a través de la escritura en un medio como El Espectador.
Transcripción
[Jorge]: Son muchas las historias que se han narrado desde el periodismo colombiano acerca de los conflictos armados y la violencia.
Gloria Castrillón, periodista y directora de Colombia+20, una iniciativa de El Espectador en temas de conflicto y posacuerdo, es nuestra invitada a este episodio del canal de podcast: Colombia, vivir en medio del conflicto del Comité Internacional de la Cruz Roja.
[Gloria Castrillón]: Hola, cordial saludo. Muchísimas gracias por la invitación.
[Jorge]: Gloria cuéntanos... ¿Cuáles son los desafíos de narrar sobre el conflicto en Colombia desde las zonas más afectadas?
[Gloria Castrillón]: Bueno, hay muchos desafíos de seguir cubriendo, digamos estos conflictos que tiene Colombia pues lastimosamente cuando se firmó el acuerdo en 2016 con las FARC creímos que pues ya eso era una etapa superada, que ya seguramente no íbamos a tener que pasar pues por cosas que vivimos los periodistas durante muchos años, por ejemplo, yo en la década de los 90...
Y pues lastimosamente nos enfrentamos a una situación que ya conoce el país y es que esa paz llegó a algunos territorios, a algunos nunca llegó, a unos llegó por un tiempo corto, y realmente esa gran transformación en la seguridad de los territorios no se vio...
Entonces el gran problema para hoy los periodistas, y te lo digo hoy porque justamente hace poco estaban equipos periodísticos de Colombia+20 en el Cauca, en el Chocó, en el Guaviare, y el gran problema para nosotros cubrir esas áreas es la dispersión y asociación de los grupos armados.
O sea, antes nosotros sabíamos que era las FARC y sabíamos que era el ELN y sabíamos que era las AUC y había unas jerarquías reconocidas, uno sabía quién era el comandante en un lado, quien era el comandante en el otro... Claramente había que tramitar algunos permisos para poder hacer cosas, contarles a los grupos armados que íbamos a hacer nuestro trabajo, hoy eso no es fácil porque imagínate que ya no tenemos esas jerarquías tan claras, cada vez están saliendo más grupos.
Entonces por ejemplo de las disidencias de FARC hay varias facciones y salen grupos de un lado y salen otro, se llaman de manera distinta, a veces esos nombres terminan confundiendo a la gente, muchas veces en territorio la gente tampoco tiene claro bien cuál grupo es ese...
Primero hay la presencia de estos grupos armados pero segundo cuando no hay esa claridad que teníamos antes pues el trabajo se vuelve cada vez más difícil. Y obviamente hay otros temas y es que, como el conflicto ha cambiado, entonces antes teníamos territorios bajo un control más o menos estable de un grupo armado. Había zonas que uno sabía que controlaba grupo o que controlaba el otro, y cuando iba hacer su trabajo como reportero pues sencillamente buscaba la manera de digamos de hacer contacto con ese grupo, de mandar una razón, de hacer digamos cualquier tipo de contacto para tener como ese permiso...
Resulta que hoy hay más zonas en disputa. Entonces no es fácil llegar a pedir permisos a tres, a veces hasta cuatro grupos que pueden estar haciendo control o más bien disputándose el control en un territorio... Les pongo ejemplos, Cauca, Catatumbo que son ejemplos de zonas que no están consolidadas y los grupos allí no son claros y además están en disputa constantemente, entonces eso hace que lastimosamente hoy tengamos unas casi vedadas a las que no podemos ir o a las que para poder ir a hacer trabajo, hay que hacer un trabajo intenso de preproducción, de conversación con líderes, con mucha gente entonces si se está dificultando mucho el trabajo para los periodistas nuevamente.
[Jorge]: ¿Cómo ha sido el trabajo de Colombia+20 de El Espectador con las víctimas de los conflictos armados y la violencia en Colombia?
[Gloria Castrillón]: Ha sido un trabajo difícil pero muy enriquecedor.
En un principio cuando nacimos no se había firmado el Acuerdo de Paz entonces nos dedicamos mucho a hacer reportería sobre las iniciativas de construcción de paz desde los territorios. Luego nos volcamos mucho a hacer pedagogía sobre el acuerdo en los territorios y trabajamos de cerca con víctimas pero no solo víctimas, sino población en general, organizaciones sociales de base. Y hoy en este punto pues ya estamos reportando, como les decía, lastimosamente una situación humanitaria muy difícil y muy compleja pero también a la vez las propuestas que tienen las comunidades para superar el conflicto y sobre todo las historias de resistencia donde nos muestran cómo las comunidades no solamente resisten de manera digna al conflicto armado, a sus diferentes fases que hemos tenido, sino que son líderes de propuestas para sacar adelante el país. Así que el trabajo ha sido enriquecedor, aprendemos todos los días no solo, insisto, de las víctimas si no de las asociaciones, organizaciones de base, de mujeres, de jóvenes, de campesinos, de afros, de indígenas, bueno esta diversidad que tiene Colombia en su organización social.
[Jorge]: Y ¿qué la motiva a seguir su labor periodística en temas tan sensibles, pero a la vez tan impregnados de "cotidianidad" como las consecuencias de los conflictos armados?
[Gloria Castrillón]: Me motiva la gente realmente.
Nuestro trabajo en Colombia+20 es un trabajo de periodismo reposado, no es un trabajo rápido, no llegamos al día siguiente de cualquier evento o a cubrir alguna situación y sacamos de una cámara y una grabadora.
Nuestro trabajo es mucho más reposado de conversación, de interacción con las comunidades y eso nos da la posibilidad de entrar en esa cotidianidad con la gente y entrando en esa cotidianidad con la gente, es que termina uno valorando mucho cuando ellos sienten que un medio como El Espectador llega a preguntarles ¿Cómo se sienten?, ¿qué piensan?, ¿qué proponen?, ¿qué propuestas tienen?, ¿cuál es la posibilidad que su territorio o su hogar tenga un momento de protagonismo en la realidad colombiana?
Cuando tú vas y escuchas lo que les pasó, cómo les pasó, porque les pasó y tratas de llevar esas historias a un medio como El Espectador, la gente se siente escuchada, se siente dignificada y siente que es importante, y que el centro de Colombia, que ha sido siempre como esta fragmentación de país, sienten que en el centro de Colombia y en los lugares de tomas de decisiones, sus testimonios van a ser por lo menos oídos, escuchados o leídos.
Entonces cuando uno ve esa importancia que le dan las personas al trabajo de un medio como el nuestro y a que nos tomemos el trabajo de hacer, digamos, este periodismo distinto un poco distinto pues entonces esto nos motiva todos porque sabemos que hay ahí una razón de ser, que estamos ayudando en algo, que estamos poniendo un grano de arena y que estamos haciendo un trabajo que a las comunidades de verdad les representa algo.
[Jorge]: Bueno, Gloria, y ¿Qué transformaciones se están generando en las zonas más afectadas por los conflictos armados respecto de la primera década de este siglo frente al hoy?
[Gloria Castrillón]: Yo creo que la principal transformación es el empoderamiento de las comunidades, el surgimiento de liderazgos en comunidades que antes no veíamos.
Yo les digo que yo llevo unos añitos cubriendo estos temas y de las cosas que más me encanta, es ver como salen cada vez más organizaciones de mujeres u organizaciones de jóvenes, que la población LGTBIQ se organiza, propone, hace, es una sociedad civil organizada, viva y actuante y propositiva y esa para mí me parece que es una de las grandes transformaciones que ha tenido Colombia. Y yo creo que la otra, claro, viene de la mano no solamente de esa sociedad civil activa, transformante, propositiva, que está empujando cambios y los cambios los estamos viendo, por ejemplo, derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, por ejemplo, en reconocimiento de diversidades, reconocimiento de derechos y eso ha sido una lucha de la sociedad civil organizada, eso creo que es una de las principales transformaciones.
Bueno y la segunda es que el Acuerdo de Paz sí en realidad ha significado transformaciones para Colombia. A veces es muy difícil que en seis años que llevamos de implementación de acuerdo seamos capaces de reconocerlos, pero yo creo que, si hay un cambio y es la posibilidad que la sociedad colombiana se dé cuenta que si podemos transformar los conflictos para que no sean armados, para que no nos matemos por las diferencias, sino que encontremos otras vías de diálogo.
Hoy Colombia está en un momento político diferente en el cual se está ampliando la posibilidad de la búsqueda de negociación con otros grupos armados que tal vez antes no habíamos tenido en consideración y creo que esa también es una importante transformación entender que la violencia no es la única salida para solucionar nuestros problemas y creo que, bueno, parece que vamos en la vía de seguir ampliando esta posibilidad y esa es una gran transformación para Colombia.
[Jorge]: y, ¿cuál ha sido el momento que más le ha marcado en su labor como periodista que informa sobre el conflicto armado?
[Gloria Castrillón]: ¡Uy! Esa pregunta es muy difícil, no es fácil sacar un solo momento cuando la historia de Colombia está llena de momentos importantes que los periodistas estamos registrando.
Yo le digo uno que me marcó mucho y fue la liberación de los soldados en el cual el CICR tuvo un papel muy importante en el año 2000 en la Macarena, Meta, en medio del diálogo que en ese momento tenía el gobierno de Andrés Pastrana con las FARC.
Ese fue un momento muy emotivo pero fue también alegre, pero fue también de mucho contraste porque es tener toda esta cantidad de soldados que estuvieron en poder de las FARC secuestrados, llegaron en unas condiciones muy difíciles, esos muchachos a los primeros que vieron fue a los delegados del CICR justamente que hacían pues todo su trabajo habitual, y las segundas personas que vieron fue a nosotros los periodistas entonces fue como una cosa muy emotiva. Fue difícil reportear ese momento y sobre todo porque todavía tenían mallas, jaulas, entonces era el contraste entre ver unos hombres allí todavía en unas mallas, como en unas jaulas, pero también saber que estaban a pocas horas de su liberación y que al vernos a los periodistas lo primero que querían era mandarles mensaje a sus familias, gritaban libertad, gritaban muchas cosas...
Fue un momento muy muy emotivo y creo que lo otro que no puedo dejar por favor de, hay dos momentos más para mí muy importantes, el otro es obviamente la firma del acuerdo final con las FARC. Yo cubrí los intentos de negociación en el Caguán, también cubrí los intentos de negociación con el ELN y con las AUC en Ralito y pues para mí como periodista era muy importante poder contarle al país que había un acuerdo final. Y más recientemente otro brevemente, pues la entrega del informe final de la Comisión de la Verdad también para mí es muy valioso, muy significativo y creo que pues abre un camino enorme para Colombia y son como esas historias esperanzadoras que quisiera seguir contando siempre.
[Jorge]: Esto está muy interesante, Gloria. ¿Cuáles son las lecciones aprendidas que ha tenido en el trayecto de su labor con respecto al trabajo con las víctimas?
[Gloria Castrillón]: Bueno, lecciones aprendidas me quedan para la vida, muchas.
Primero el sentido de grandeza y de dignidad de una cantidad de personas que solo recibieron durante mucho tiempo un gran maltrato por parte del Estado y además después fueron víctimas de diferentes actores armados. El ver en ellas y el escuchar de ellas la palabra dignidad, pero no solo escucharla sino verla en su actuar diario, en qué se transmite, cómo se transmite la dignidad entre personas, de madre a hija, entre colegas que trabajan en organizaciones sociales, cómo resistir no es una palabra vacía sino que significa en el día a día salir y seguir haciendo su trabajo pese a que todo el mundo o muchas personas estén en contra o todas las condiciones estén en contra, cómo no amilanarse y pensar en cómo me levanto al otro día por seguir haciendo este trabajo, eso para mí ha sido un aprendizaje enorme...
Pero el principal viene de las mujeres no porque yo sea mujer, sino porque es que de verdad, lo que han hecho las mujeres en Colombia es muy significativo. Incluso las mujeres, y quiero destacarlas, que por condiciones difíciles en su diario vivir tuvieron que irse a un grupo armado irregular, tomar un arma para sentirse en algún momento emancipadas o en algún momento libres de cosas que les oprimían o situaciones que les oprimían en sus casas y en sus cotidianidades...
Aún en ellas, incluso cuando salieron, empuñaron un arma, cometieron delitos y pudieron haber hecho cosas que para este país son espantosas y que son realmente espantosas, incluso en ellas que ya dejaron las armas, que decidieron irse por la maternidad y que decidieron apostarle a crear familia, a crear una sociedad distinta a mí, incluso también en ellas veo ese tema de la dignidad muy fuerte pero sobre todo insisto en millones de madres sobre todo mujeres que se echaron al hombro la recuperación del tejido social en sus comunidades porque a sus esposos los habían matado o los habían desaparecido o sencillamente se fueron, porque eso también pasa y quedan las mujeres liderando y llevando a cuestas no solamente la familia si no la reconstrucción de esa comunidad que se rompió... Y después más adelante piensan en ellas y se superan y terminan estudiando y haciéndose profesionales, mire de esos casos he visto un montón y ese para mí es el principal aprendizaje que me dejan las víctimas en Colombia.
[Jorge]: y ¿Qué mirada te deja la guerra en Colombia luego de tantos años trabajando en el cubrimiento periodístico de desplazamientos, confinamientos, desapariciones, intentos fallidos de procesos de paz y la firma del Acuerdo de La Habana
[Gloria Castrillón]: Es difícil decir si hay una mirada positiva después de haber cubierto tanto dolor y seguirlo haciendo...
Pues yo creo que la gran lección es que tenemos que terminar con la guerra, para mí esa es la gran lección. No podemos seguir en guerra, no se puede seguir pensando que la salida es tomar las armas para defender una idea o que la idea es acabar al otro porque piensa distinto. Ese para mí debería ser el principal propósito que tuviera la sociedad colombiana hoy, y aprender obviamente las lecciones de lo que ya ha ocurrido. Tenemos procesos de paz exitosos en Colombia... Si algo tiene Colombia para mostrarle al mundo son procesos de paz exitosos así que ese es el camino ya marcado y creo que por ahí puede ser el asunto.
Y lo otro pues es seguir viéndonos como una sociedad muy diversa, seguir pensando en cómo podemos incluirnos más, en mirarnos menos distintos, es decir, reconocer la diferencia claramente, pero no ver al otro digamos de manera diferente a mí, sino que sencillamente es un ser humano igual a mí que piensa distinto... Yo creo que esas son como las dos grandes lecciones que nos deja esta historia vivida y que sigue lastimosamente del conflicto armado en Colombia o de los conflictos armados en Colombia.
[Jorge]: Gloria, gracias por habernos regalado este tiempo, por sacar este rato para hacer esta conexión y estar hoy en este episodio del canal de pódcast del CICR: "Colombia, vivir en medio del conflicto".
[Gloria Castrillón]: Muchas gracias al CICR que hace posible el trabajo de los periodistas en Colombia y que le ayuda tanto a la sociedad colombiana.
Yo solamente me despido con un mensaje, no solo como periodista sino como ciudadana y como mamá... Y es que en nuestros hijos y en nuestros nietos podemos todos los días inculcar este mensaje del reconocimiento en la diferencia del respeto al otro y de la vía siempre política, negociada a cualquier tipo de conflicto que tengamos en nuestra casa desde el más pequeño, en el colegio, en la universidad para ir escalando eso y tener una sociedad distinta dentro muy poco tiempo.