“Esperamos tener una respuesta”; la importancia de una Ley de Desaparición en Honduras para quien busca a un ser amado
Tegucigalpa. Uno de los profundos retos que enfrenta Honduras es la desaparición de personas en diversos contextos, como los son la violencia armada y la migración. Según cifras de la Secretaría de Seguridad, en la última década un total de 9.838 individuos han desaparecido en el país, en su gran mayoría jóvenes.
Ante esta situación, un importante avance por la protección de las personas desaparecidas y sus familiares ha tomado lugar. Durante una reciente reunión con la Comisión de Dictamen del Congreso Nacional, familiares de personas desaparecidas han urgido la aprobación de la Ley de Protección Jurídica de Personas Desaparecidas y de sus Familiares, cuya iniciativa fue presentada en julio por el presidente del Congreso, Luis Rolando Redondo.
Este marco legal es crucial, pues busca prevenir y construir una respuesta efectiva e integral frente a la desaparición de personas y sus consecuencias sobre las familias. La iniciativa de ley sobre desaparición en Honduras consta de cinco títulos a través de los cuales determina las obligaciones del Estado hondureño en materia de desaparición, búsqueda, localización e identificación de personas desaparecidas y fallecidas; y reconoce los derechos de las personas desaparecidas y sus familiares, entre ellos, el derecho a la búsqueda inmediata, a la verdad, a la justicia, a la reparación y a la no repetición.
La iniciativa de ley reconoce a las personas desaparecidas todos los derechos previstos en la Constitución de la República, así como otros instrumentos normativos. Destaca la responsabilidad en la cadena de mando e investigación de las desapariciones y establece un sistema de protección y búsqueda.
La desaparición de personas es un flagelo que exige atención urgente, y los Estados tienen la responsabilidad de prevenir, atender y proteger a las familias que sufren las consecuencias de esta situación. La adopción de una ley específica para abordar las desapariciones en Honduras y de un mecanismo nacional de búsqueda constituiría un paso fundamental para su prevención y atención, así como para garantizar los derechos de las personas para su acceso a medidas de asistencia.
Las palabras de Mercedes Guillén, quien busca a su esposo y expresó en garífuna, reflejan la importancia de esta iniciativa para quienes buscan a un ser querido: "No perdemos la esperanza de que vamos a encontrar a nuestros familiares. Tenemos la fe de que se implemente esta ley para que nos pueda respaldar y ayudar en esta lucha por nuestros familiares desaparecidos... para que el gobierno pueda cumplir con lo que está plasmado en la ley en beneficio de los familiares de las personas desaparecidas".
Darwin Pineda, del Comité de Familiares de Migrantes Desaparecidos del Sur de Honduras (COFAMIDESUR), destaca que esta ley busca asegurar que los derechos de las personas desaparecidas sean respetados y confía en que cuente con el apoyo de todas las bancadas y de los 128 diputados y diputadas del Congreso Nacional.
Para las familias esta propuesta representa una oportunidad de ser reconocidas por parte del Estado de para obtener el apoyo necesario en la búsqueda de sus seres queridos. Ante legisladoras y legisladores, Ana Cecilia Turcios Sánchez, también de COFAMIDESUR y, quien desde hace 11 años busca a su hijo desaparecido en la ruta migratoria, declaró: "No perdemos la esperanza. Mi hijo salió con la idea de una vida mejor (...) y poder ayudarme a mí, pero el destino le cortó ese sueño (y) no sabemos cuál ha sido su paradero hasta el día de hoy. Con esta ley esperamos tener una respuesta cada una de nosotras como madres, como padres, como hermanos, esposos, hijos que tenemos un familiar desaparecido. Es muy duro y no se lo deseo a nadie... detrás de mí hay un montón de madres a las cuales yo acompaño ahora debido al dolor".
Ana hizo énfasis en que "hemos estado solos todos los familiares y hoy necesitamos que esta ley se cumpla para que el Estado nos pueda apoyar, porque es el Estado el único que puede dar esa respuesta a cada madre, a cada familia".
El proceso de concepción de la Ley de Protección Jurídica de Personas Desaparecidas y de sus Familiares ha sido colaborativo, involucrando activamente a las propias familias de las víctimas y a las organizaciones que las acompañan. Esto promueve que el proyecto de ley refleje las experiencias y propuestas y atienda las necesidades de las familias en la búsqueda de sus seres queridos.
El respaldo e interés del Congreso Nacional de Honduras ha sido fundamental para construir e impulsar una propuesta jurídica que aborda de manera integral el tema de la desaparición en el país, y será esencial para su aprobación y futura implementación.
El Comité Internacional de la Cruz Roja reconoce el avance significativo que representaría una la Ley de Desaparición en Honduras, pues a través de una correcta implementación contribuiría a avanzar hacia el cumplimiento por parte del Estado hondureño de sus obligaciones internacionales en la materia, incluidas aquellas derivadas de la ratificación de la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas de las Naciones Unidas.
El CICR reafirma su compromiso de seguir apoyando los esfuerzos de las familias, del Estado hondureño y de las organizaciones involucradas en la búsqueda de personas desaparecidas y la protección de los derechos de sus familiares.
El CICR, fundado en 1863, ayuda a personas de todo el mundo afectadas por conflictos armados y otras situaciones de violencia, haciendo lo posible por proteger su dignidad y aliviar su sufrimiento, a menudo junto a sus asociados de la Cruz Roja y la Media Luna Roja. Además, la Institución procura prevenir el sufrimiento mediante la promoción y el fortalecimiento del derecho y de los principios humanitarios universales.
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Contacto de prensa: Bianca Solórzano, encargada de comunicación en Honduras: bsolorzanomejia@icrc.org, +504 9452-5422