Carmen vive en un barrio de Caracas desde siempre. “Mi hijo mayor se fue a vivir afuera hace unos meses, a probar suerte por allá. Tengo otros dos hijos que viven conmigo. No tengo trabajo, pero ayudo en la parroquia de la comunidad haciendo tareas sociales. Sueño que todos en la comunidad seamos unidos, porque lo mejor que tenemos en nuestro barrio es la gente. Yo no tengo forma de solucionar los problemas de todos los jóvenes de aquí con mis propias manos, pero busco ayuda de otras organizaciones como instituciones sociales, gubernamentales, etc… No me doy por vencida fácilmente y trato de ser positiva tanto como sea posible, aunque la situación actual sea difícil.”