Ginebra (CICR) – Los millennials consideran la perspectiva de una guerra catastrófica como una posibilidad real en el trascurso de su vida. De hecho, la mayoría de los miembros de esta generación encuestados por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) consideran que es altamente probable que se produzca un ataque nuclear en los próximos diez años.
El año pasado, el CICR encargó la realización de una encuesta de la que participaron más de 16.000 millennials en 16 países, de los cuales, aproximadamente, la mitad están en paz y la otra, en conflicto. El estudio analiza las perspectivas de los millennials sobre los conflictos, el futuro de la guerra y los valores en los cuales se basa el derecho internacional humanitario, como la prohibición de la tortura en contra de los combatientes del enemigo.
Los resultados indican que los millennials sienten intranquilidad respecto del futuro, temor que probablemente se avive a raíz de la escalada de tensiones en todo el mundo.
Un gran número de encuestados (47%) creen que es sumamente probable que se desate una tercera guerra mundial en el trascurso de su vida. Y, si bien el 84% considera que el empleo de armas nucleares no es aceptable en ninguna circunstancia, el 54% piensa que existen altas probabilidades de que se produzca un ataque nuclear en los próximos diez años.
"Este presagio de los millennials puede reflejar un aumento en la polarización y la retórica deshumanizante", señaló Peter Maurer, presidente del CICR. "Si los millennials están en lo cierto al pensar que estallará una tercera guerra mundial, el sufrimiento será enorme. Todo esto nos recuerda la gran importancia del respeto de las leyes de la guerra, que protegen a la humanidad, hoy y en el futuro."
Un dato alentador es que el 74% de los encuestados consideran que las guerras son evitables; casi el mismo porcentaje (75%) opina que deben imponerse límites a la manera en que se libran las guerras.
No obstante, la encuesta revela tendencias preocupantes que indican una falta de respeto por los valores humanos esenciales consagrados en el derecho internacional: el 37% de los encuestados creen que la tortura es aceptable en determinadas circunstancias —incluso tras recibir una explicación sobre la convención de las Naciones Unidas que prohíbe esa práctica—, y el 15% opina que los combatientes deben hacer todo lo que puedan para ganar, más allá de las víctimas civiles que se produzcan.
Las respuestas ponen de relieve que la experiencia de la guerra engendra odio hacia ella. En Siria, el 98% indicó que el empleo de armas nucleares no es aceptable en ninguna circunstancia; el 96% indicó lo mismo sobre las armas químicas; otro 96%, al respecto de las armas biológicas; y el 85% opina que se debe permitir a los combatientes del enemigo capturados establecer contacto con sus familiares. Estas cuatro respuestas arrojaron los porcentajes más elevados de los 16 países participantes.
"Cuando ves a tus amigos y familiares sufrir los horrores de la guerra, no quieres saber nada de las armas de la guerra. Las respuestas que dieron los millennials en Siria, Ucrania y Afganistán confirman un hecho evidente para nosotros: la experiencia de la guerra provoca odio hacia la guerra", afirmó Maurer.
Las personas que viven en países en conflicto tienden más a pensar que, en el futuro, las guerras disminuirán o desaparecerán, en comparación con los encuestados de países en paz (46% y 30%, respectivamente). Las respuestas provenientes de países en guerra también reflejan un alto grado de esperanza: el 69% de los encuestados de Ucrania piensan que es probable que la guerra en su país termine en los próximos cinco años.
Armas nucleares: los resultados reflejan una ambigüedad en torno del tema de las armas nucleares: por lo menos, dos tercios de los encuestados en los 16 países afirmaron que el uso de las armas nucleares "no es aceptable en ninguna circunstancia", pero la mayoría (54%) también considera que se producirá un ataque nuclear en los próximos diez años. Este mismo porcentaje opina que las armas nucleares deberían prohibirse.
En Siria, el 98% manifestó que el empleo de estas armas no es aceptable en ninguna circunstancia; le siguen Colombia (93%), Ucrania (92%) y Suiza (92%). Del otro lado del espectro se encuentran las respuestas de Nigeria (68%) y Estados Unidos (73%).
Cuatro de cada cinco encuestados afirmó que la existencia de las armas nucleares representa una amenaza para la humanidad; el 64% de los encuestados afirmó que los Estados que las poseen deberían eliminarlas.
Principales preocupaciones para los millennials: pese a manifestar esas opiniones respecto de un ataque nuclear en el futuro, los encuestados también señalaron las armas nucleares como lo menos preocupante a partir de una lista de doce temas. Lo que más preocupación despierta es la corrupción, señalada como tal por el 54% de los encuestados, seguida por el desempleo (52%), la pobreza creciente y el terrorismo (47% ambos), y la guerra y los conflictos armados (45%). El 24% de los encuestados mencionaron las armas nucleares.
El futuro del combate: sobre el futuro del conflicto, el 36% de los encuestados opinaron que los drones y los robots autónomos, es decir, no controlados por seres humanos, provocarán un aumento en el número de víctimas civiles de las guerras y los conflictos armados; el 32% indicó que provocarán una disminución de ese número y el 24%, que no cambiarán nada.
Víctimas civiles: el 78% de los encuestados opinan que los combatientes deben evitar las víctimas civiles tanto como sea posible. El porcentaje en los países en paz fue superior al de los países en conflicto (83% frente a 73%).
Salud mental: el 73% indicó que la atención en salud mental de las víctimas de los conflictos es tan importante como la atención de sus necesidades en materia de agua, alimentos y refugio. El porcentaje más alto de respuestas que se inclinan hacia esta opinión se registró en Siria (87%), mientras que el más bajo, en Israel (60%).
Tortura: el 55% afirma que torturar a combatientes del enemigo capturados no es aceptable en ninguna circunstancia; los porcentajes más elevados se registraron en Siria y Colombia (71% en ambos países), mientras que los más bajos surgieron en Israel (23%) y Nigeria (29%).
Convenios de Ginebra: el 75% considera que, 70 años después de la firma de los Convenios de Ginebra, aún existe la necesidad de imponer límites a la manera en que se libran las guerras. El 54% de los encuestados han oído hablar de los Convenios de Ginebra; los porcentajes más elevados se registraron en Siria (81%), Rusia y Ucrania (76% en ambos), Francia (75%) y Suiza (74%).
Metodología:
La encuesta "Los millennials y la guerra" fue encargada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) a la empresa Ipsos, que la llevó adelante entre el 1 de junio y el 7 de octubre de 2019, a partir de una metodología mixta. Se realizaron 16.288 entrevistas a adultos de entre 20 y 35 años en los siguientes 16 países: Afganistán, Colombia, Estados Unidos, Francia, Indonesia, Israel, Malasia, México, Nigeria, Reino Unido, Rusia, Siria, Sudáfrica, Suiza, territorio palestino ocupado y Ucrania.
Se establecieron cupos de encuestados de determinadas edades, regiones y tipos de asentamientos para que la muestra fuera representativa de las estructuras poblacionales de los millennials en los respectivos países según esas variables.
Nota a los editores: se puede solicitar acceso a los datos por país. Más datos sobre la encuesta en www.icrc.org/es/millennials-y-guerra. Estarán disponibles para su difusión videos de entrevistas a millennials de distintos países, así como material complementario de escenas de conflictos en http://www.icrcnewsroom.org.
Más información:
Anita Dullard (inglés), adullard@icrc.org o +41 795 741 554
Juliette Ebele (francés, inglés), jebele@icrc.org o +41 78 785 18 20
Jason Straziuso (inglés), jstraziuso@icrc.org o +41 79 949 3512