Libia: se necesita más ayuda humanitaria mientras la violencia continúa

13 abril 2015
Libia: se necesita más ayuda humanitaria mientras la violencia continúa
Tiji, montañas de Nafusa, Libia, noviembre de 2013. Personal del CICR y de la Media Luna Roja Libia distribuye artículos de primera necesidad a personas que padecen los efectos del conflicto. [CC BY-NC-ND/CICR/M. Hsini]

No hay señales de que la violencia vaya a disminuir. Libia todavía es escenario de una mezcla de conflictos alimentados por numerosos grupos armados con lealtades y motivaciones diversas. Miles de personas han muerto y cientos de miles más han tenido que desplazarse. La situación humanitaria se deteriora cada día más. El CICR y su asociado, la Media Luna Roja Libia refuerzan su apoyo a las personas más vulnerables de las que están atrapadas por la violencia.

Con varios conflictos activos desde Bengasi, en el este, hasta Trípoli, en el oeste, y Sabha, en el sur, y en gran parte del territorio entre estas localidades, la intensidad de la violencia varía, pero los resultados son los mismos: colapso de los servicios básicos, aumento de los precios de los alimentos básicos, cortes de luz, escasez de combustible y agua y una sensación de incertidumbre abrumadora entre la población. El acceso a la atención de salud también se ha vuelto extremadamente difícil.

Al-Marj, Libya, January 2015. ICRC and Libyan Red Crescent personnel distribute food and other essentials to displaced persons. [CC BY-NC-ND / ICRC / F. Elebeid]

Al-Marj, Libia, enero de 2015. Personal del CICR y de la Media Luna Roja Libia distribuye alimentos y otros artículos de primera necesidad entre personas desplazadas. [CC BY-NC-ND/CICR/F. Elebeid]

"Hemos incrementado nuestra respuesta a las urgencias que surgen de la situación actual, pero es extremadamente difícil acercarse a las víctimas por las limitaciones en materia de seguridad", señala la jefa de la delegación del CICR en Libia, Katja Lorenz. "Estamos tratando de encontrar maneras de ayudar a las personas de una forma más eficaz. Pero, para ayudar a las víctimas de los conflictos, se debe respetar a los trabajadores humanitarios y facilitar su labor".

Con más de 100 trabajadores libios activos en todo el país y con oficinas operacionales en Trípoli, Bengasi, Misrata y Sabha, el CICR es la mayor organización humanitaria internacional sobre el terreno. En colaboración con la Media Luna Roja Libia, el CICR está haciendo todo lo que puede para aliviar la situación.

Al-Marj, Libya, January 2015. ICRC and Libyan Red Crescent personnel distribute food and other essentials to displaced persons. [CC BY-NC-ND / ICRC / F. Elebeid]

Al-Marj, Libia, enero de 2015. Personal del CICR y de la Media Luna Roja Libia distribuye alimentos y otros artículos de primera necesidad entre personas desplazadas. [CC BY-NC-ND/CICR/F. Elebeid]

"Esperamos que los enfrentamientos terminen pronto, pero el futuro es imprevisible y, mientras tanto, la situación humanitaria se deteriora", afirma la jefa de Activiades Operacionales del CICR para África Septentrional y Occidental, Yasmine Praz Dessimoz.

Incrementar la ayuda

Al igual que otras organizaciones internacionales, el CICR trasladó a parte de su personal a Túnez y desarrolló nuevos métodos para trabajar en Libia. "Hemos demostrado que nuestro nuevo método operacional funciona. Ahora queremos ampliarlo y tener acceso a más personas. En particular, queremos entregar más insumos médicos a los hospitales, más alimentos y artículos domésticos de primera necesidad a personas necesitadas y ayudar a la Media Luna Roja Libia a reforzar su capacidad", señala Yasmine Praz Dessimoz.

El CICR ha tenido presencia permanente en Libia desde 2011. Es una de las muy pocas organizaciones internacionales que todavía están presentes y activas en el país y en condiciones de prestar ayuda humanitaria. Dado que la situación en Libia da pocas muestras de mejora a corto plazo, el CICR y la Media Luna Roja Libia van a seguir dando apoyo a la población libia y y van a incrementar sus esfuerzos por satisfacer las necesidades crecientes.

Al-Marj, Libya, January 2015. ICRC and Libyan Red Crescent personnel distribute food and other essentials to displaced persons. [CC BY-NC-ND / ICRC / F. Elebeid]

Al-Marj, Libia, enero de 2015. Personal del CICR y de la Media Luna Roja Libia distribuye alimentos y otros artículos de primera necesidad entre personas desplazadas. [CC BY-NC-ND/CICR/F. Elebeid]

Entre noviembre de 2014 y marzo de 2015, el CICR llevó a cabo las siguientes actividades para ayudar a la población afectada por el conflicto en Libia:

  • Junto con la Media Luna Roja Libia, distribuyó alimentos para unas 11.300 personas vulnerables desplazadas en el interior del país y distribuyó artículos dométicos de primera necesidad (mantas, colchones, utensilios de cocina, lonas impermeables, etc.) entre 18.400 personas en todo el país;
  • entregó insumos y material médico de urgencia a 10 hospitales en zonas afectadas por la violencia, para beneficiar a 12.250 pacientes. Los insumos consistieron en medicamentos, vendas, elementos de fijación externa, instrumentos quirúrgicos y material para tratar a personas con heridas de arma;
  • organizó cursos de capacitación sobre cirugía y atención de urgencias por traumatismos, en Túnez, para alrededor de 50 médicos y cirujanos de toda Libia; está previsto organizar más cursos en julio de 2015.
  • ayudó a la Media Luna Roja Libia a gestionar los cadáveres de personas fallecidas a raíz de la violencia y de migrantes que se ahogaron en el mar, facilitándole equipos para la gestión de cadáveres y bolsas para cadáveres;
  • dio apoyo a los departamentos forenses en Trípoli y Bengasi;
  • donó tres camiones a la Media Luna Roja Libia, como apoyo a sus actividades operacionales;
  • dio asesoramiento a la Media Luna Roja Libia;
  • ayudó a mantener el contacto entre familias en Libia y sus seres queridos detenidos fuera del país, mediante la organización de llamadas telefónicas y videoconferencias y el intercambio de noticias de índole familiares (a través de saludos orales conocidos como "salamats" y mensajes de Cruz Roja);
  • entregó artículos para el aseo personal y ropa a 509 migrantes en el Centro Karereem, en Misrata;
  • a pedido de la embajada de Senegal, contribuyó a la repatriación voluntaria de 401 migrantes senegaleses, mediante la producción de fotografías para su documentación de viaje;
  • facilitó documentación de viaje a una mujer de Eritrea y a su hija, para que pudieran reunirse con su familia en Francia.