Ciudad de México, México – En un mundo donde millones de personas sufren las devastadoras consecuencias de los conflictos armados, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) hace un llamado urgente a los Estados para que prioricen su compromiso con la humanidad y el respeto a las leyes de la guerra.
El 4 y 5 de julio, el CICR y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México encabezarán un evento en la Ciudad de México que reunirá a países de las Américas para conmemorar el 75º aniversario de los Convenios de Ginebra de 1949. La reunión regional, celebrada en la cancillería mexicana, reúne a representantes de más de 15 Estados en las Américas para reflexionar sobre el DIH en la actualidad, teniendo en cuenta el pasado y mirando hacia el futuro. Los participantes debatirán sobre los retos contemporáneos, como las operaciones cibernéticas y de información, los sistemas de armas autónomas y el uso de la inteligencia artificial durante operaciones militares.
En el año del 75º aniversario de los Convenios de Ginebra de 1949, conmemorados junto a la SRE, el CICR llama a los Estados a incorporar el derecho internacional humanitario (DIH) como prioridad legal dentro de su ordenamiento nacional y como política pública tanto interna como exterior.
"Los Convenios de Ginebra aseguran que, incluso durante la guerra, se mantenga un mínimo de humanidad. En estos tiempos de polarización de la opinión pública, es fundamental que los Estados reafirmen este compromiso compartido con la humanidad y hagan del cumplimiento del derecho internacional humanitario y del respeto de los valores humanitarios que lo sustentan su prioridad política. No hacerlo, en el contexto del demoledor impacto de los conflictos armados, sería dar la espalda a los miles de personas víctimas de las guerras”, expresó Romina Morello, asesora jurídica regional para las Américas del CICR.
Desde 1999, el número de conflictos armados activos en el mundo ha aumentado dramáticamente, pasando de 20 a 120 en la actualidad, según registros del CICR. En las últimas dos décadas y media, a pesar de numerosas resoluciones, las personas civiles han sido atacadas, desplazadas y asesinadas de las maneras más reprensibles.
En este contexto, es evidente la vigencia de los Convenios de Ginebra de 1949 y sus Protocolos Adicionales, base del DIH, que tienen como fin limitar los medios y métodos utilizados durante los conflictos armados y proteger a la población, bienes civiles y a las personas que han dejado de participar en las hostilidades.
“Este año se cumplen 75 años desde que el mundo fue testigo de la adopción de los Convenios de Ginebra. Sin duda, ha sido un hito histórico que ha permitido construir las normas básicas (...) que dan a los Estados obligaciones muy claras para salvaguardar innumerables vidas y se han establecido así normas fundamentales para la protección de las víctimas en los conflictos armados. Estos convenios representan el pilar del derecho internacional humanitario convencional y reflejan la esperanza de la humanidad en medio de la adversidad y la guerra”, expresó Joel Hernández, subsecretario para asuntos multilaterales y de derechos humanos de la SRE.
También se destacará la necesidad de un mejor cumplimiento del DIH, apuntalando las medidas nacionales de implementación como camino a seguir. Para ampliar el diálogo y facilitar el intercambio entre las múltiples partes interesadas, también participan expertos jurídicos en DIH del CICR y del mundo académico.
La realidad actual muestra que continúan ocurriendo violaciones sistemáticas a los Convenios de Ginebra, con consecuencias devastadoras no solo para las personas y sus familias, sino también para las comunidades y la estabilidad de regiones enteras. La principal causa de sufrimiento durante los conflictos armados no es la falta de reglas, sino el respeto insuficiente de las normas que los rigen.
Al mismo tiempo, el número de conflictos armados en los que se obstaculiza la prestación de ayuda humanitaria está en aumento. Las organizaciones humanitarias neutrales e imparciales, como el CICR, enfrentan una presión constante debido a objetivos políticos y militares.
“El derecho internacional humanitario no fue creado para justificar muertes, sufrimiento sin fin y destrucción. Su meta principal es proteger la vida y la integridad, así como asegurar el respeto a los seres humanos incluso durante los conflictos bélicos. Esto es algo que debemos impulsar, defender y llevar como nuestra bandera. La gente atrapada en conflictos armados necesita acciones, no palabras”, afirmó Olivier Dubois, jefe de la delegación regional del CICR para México y América Central.
Las reglas del derecho internacional humanitario no conciernen solo a los países que enfrentan conflictos armados en el presente. Son normas imperativas de derecho internacional que generan obligaciones para las partes de los conflictos y para la comunidad internacional en su conjunto en tiempos de guerra como de paz
Promover y comprometerse con el DIH en tiempos de paz no solo es una obligación legal, sino una inversión en la estabilidad y la humanidad de cualquier sociedad. Esto puede mejorar las relaciones diplomáticas y la cooperación en áreas como la ayuda humanitaria y la resolución de conflictos.
El evento en la Ciudad de México será también una oportunidad para presentar una visión general del funcionamiento de la Conferencia Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y de su 34ª edición como también trabajar en las promesas que se hagan para incrementar el cumplimiento del DIH. En octubre se reunirán en Ginebra todos los Estados Parte de los Convenios de Ginebra y representantes de los componentes del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (las Cruces Roja de cada país, Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y el CICR).
La Conferencia, titulada “Navegar en la incertidumbre - Fortalecer la humanidad”, constituye un foro apolítico en el que los componentes del Movimiento tienen la misma voz que los Estados. Uno de los objetivos del evento es buscar apoyo de los gobiernos a una resolución destinada a proteger a los civiles, las instalaciones médicas y las organizaciones humanitarias contra las operaciones cibernéticas y de información durante los conflictos armados.
El CICR reafirma su compromiso de apoyar a los Estados en el respeto del derecho internacional humanitario y la preservación de la humanidad. Hacemos un llamado a una acción decidida en favor de la paz y la seguridad de las personas atrapadas en conflictos armados.