Haití: Adems, alias Samuel, en el afiche de la esperanza

06-01-2011 Reportaje

En los momentos de horror que se vivieron después del terremoto del 12 de enero de 2010, decenas de niños quedaron separados de sus padres. Algunos eran todavía muy pequeños como dar las informaciones necesarias para buscar a sus padres. La publicación, en todo el país, de un afiche con sus fotos permitió que muchos de esos niños reencontraran a sus familiares. Es lo que le sucedió al pequeño Adems, rebautizado Samuel por su primera familia de acogida.

  Lea también la entrevista a la responsable del programa de restablecimientodel contacto entre familiares en Haití        
©CICR / O. Miltcheva 
   
Adems, dos meses después de haber encontrado a su familia.  
               
©CICR / O. Miltcheva 
   
Adems con su padre. 
           

  Olga Miltcheva acompañó al equipo del CICR que volvió a visitar al niño dos meses después del feliz reencuentro.  

El coche del CICR sale de Delmas, la gran arteria transitada y ruidosa de Puerto Príncipe, para aventurarse por las callejuelas estrechas de un barrio parcialmente destruido. " A partir de aquí, hay que ir a pie " , anuncia, sonriendo, el conductor. El equipo toma un pasaje y atraviesa patios internos. Las mujeres lavan la ropa, los niños juegan.

En ese pequeño laberinto viven Emmanuel y su familia. Emmanuel, de treinta años y gran estatura, es policía y está orgulloso de su oficio. Transmite fuerza, pero también la dignidad tranquila de una persona que ha vivido lo peor sin exponer su sufrimiento ante todos. Y, sin embargo, el terremoto causó la muerte de unos de sus hijos, el mellizo de Adems, hirió gravemente a su hija y destruyó una parte de su casa. Su segundo hijo, Adems, fue dado por desaparecido durante varios meses.

 El día en que todo tembló  

" Cuando se produjo el terremoto, yo no estaba en casa, estaba trabajando " , dice Emmanuel con un suspiro de lamento y amablemente coloca unas sillas para el equipo del CICR en la entrada de la vivienda. " En esa época, aquí había una pared; al lado dormían mis hijos. La pared se derrumbó. Isaak, uno de los mellizos, murió bajo los escombros, y Christie, la hermana de cinco años, quedó gravemente herida en la cabeza. "

Adems, el otro mellizo, recibió heridas leves. En medio de los llantos, la polvareda y el pánico, la madre salió a pedir ayuda médica para su hija. El niño fue confiado a un vecino, que a su vez se lo entregó a otro vecino... y unas horas más tarde, cuando Emmanuel por fin logró atravesar la ciudad para volver a su casa, nadie sabía dónde estaba el niño. " Fue una desolación total " , recuerda. La familia busco al niño sin respiro, por intermedio de las radios y recorriendo los campamentos de desplazados, hasta el día en que una vecina reconoció la foto de Adems en uno de los afiches del CICR.

 El niño del afiche  

El relato de Emmanuel es interrumpido por un grito de alegría, seguido por el torbellino que hace un pequeño al entrar. Es un niño enérgico, travieso y bien fuerte, que vuelve de la guardería con su mamá. " Oh, Samuel, ¡has cambiado mucho! " , exclama Isabelle, delegada del CICR responsable del programa de búsqueda de familiares. Se corrige rápidamente: " Oh, lo siento, había olvidado que te llamas Adems... "

Samuel es el nombre que le dio su primera familia de acogida, inmediatamente después del terremoto. Con la intención de transmitir un anuncio de búsqueda de familiares, esa familia llevó al niño a un estudio de la televisión nacional, que lamentablemente estaba en ruinas. Luego, el niño fue acogido en un campamento de desplazados, antes de que el CICR registrara sus datos y de que fuera colocado temporariamente en SOS Villages, uno de los mejores orfanatos de Puerto Príncipe. Sin conocer el nombre verdadero del niño ni los de sus padres, el CICR publicó una foto, junto con las de otros veinte niños, en uno de los afiches distribuidos en todo el país. Y, finalmente, Adems pudo reunirse con sus seres queridos.