Bosnia-Herzegovina: familiares de personas desaparecidas continúan buscando a sus seres queridos

28-08-2013 Reportaje

Munira, Milan y Josip, de Bosnia-Herzegovina, han vivido en la incertidumbre desde que finalizó el conflicto en su país, con la firma del Acuerdo de Paz de Dayton, en 1995.

Munira Subasic, ciudadana bosnia originaria de Srebrenica, no había tenido noticias de sus familiares desde la caída de su ciudad de origen, en julio de 1995. Encontró a su marido Hilmo, en 2004. Fue exhumado de una fosa cerca de Srebrenica, mientras que su hijo Nermin, que tenía sólo 19 años cuando desapareció, fue encontrado este año. Sus restos no estaban completos y, en lo que fue una desgarradora decisión, Munira aceptó sepultar sólo un hueso de su hijo.

Milan Mandic, ciudadano serbio originario de Sarajevo, perdió a su padre, Bozo, de 64 años de edad, al comienzo de la guerra en Dobrinja, un suburbio de Sarajevo. Han pasado veintiún años, pero Milan sigue sin tener noticias de su paradero.

Josip Brezjak, ciudadano croata originario de Mostar, perdió a sus padres a principios de septiembre de 1993. Es el único sobreviviente del ataque militar contra su poblado.

Provienen de diferentes comunidades étnicas, que eran enemigas durante la guerra. Hoy en día, simbolizan a miles de familias, en todo el país, que han hallado la fuerza para superar viejas animosidades en pos de un objetivo primordial: saber qué les sucedió a sus familiares desaparecidos. Para ello, continúan insistiendo ante las autoridades, incluidos ex enemigos, para que les den respuesta y cooperen. La unidad de las familias muchas veces se ve puesta a prueba, pero el dolor las vuelve a juntar, y continúan el proceso de búsqueda.

El papel del CICR

El CICR ha realizado actividades desde el inicio del conflicto. La Institución logró incluir un artículo en el acuerdo de paz, por el que se obliga a las ex partes beligerantes a ayudar a averiguar el paradero de las personas desaparecidas durante el conflicto de 1992-1995. El CICR ayudó a las familias a crear asociaciones y promovió su derecho a saber qué les sucedió a sus allegados desaparecidos. También estableció un foro para que las ex partes en conflicto puedan intercambiar información sobre las personas desaparecidas.

El CICR prestó apoyo a otra institución, la Comisión Internacional de Personas Desaparecidas, que luego impulsó el establecimiento del Instituto de Personas Desaparecidas. También participó en la elaboración de la ley de Bosnia-Herzegovina de Personas Desaparecidas, en la que se definió claramente el estatuto y los derechos de los familiares de personas desaparecidas, así como la obligación de las autoridades de dar cuenta de todas las desapariciones, brindando información y apoyo al Instituto de Personas Desaparecidas.

Este Instituto reconoció la importancia de los familiares, al instaurar un órgano consultivo de seis representantes de las 52 asociaciones de familiares de personas desaparecidas existentes en el país. Ese órgano, que tiene una amplia representación étnica y regional, expresa la voz de los familiares y es un canal de comunicación entre los familiares y el Instituto. El CICR continúa prestando apoyo al órgano consultivo.

Exhumaciones e identificaciones

La labor que se realiza en Bosnia-Herzegovina en relación con las personas desaparecidas no tiene comparación: desde la definición jurídica del tema de las exhumaciones de fosas comunes e individuales hasta la identificación de restos mortales. Los familiares han presentado solicitudes de búsqueda al CICR en relación con 22.438 personas. En total, 14.552 de esas familias han recibido información sobre sus parientes desaparecidos. Sin embargo, 7.886 familias siguen buscando información. Las exhumaciones son una forma importante de ayudar a las familias a encontrar algo de paz. Sin embargo, el año pasado, el avance de las exhumaciones se redujo significativamente. A lo largo de los últimos doce meses, se logró identificar sólo 650 conjuntos de restos mortales, en comparación con los 2.000 identificados hace unos años. El CICR y sus socios hacen todo lo posible para que se mantenga la voluntad política de brindar información sobre la ubicación de las fosas.

Se ha establecido un nuevo Registro Central de Personas Desaparecidas a fin de acelerar el proceso de búsqueda. Para muchos, ese registro es la última prueba de vidas alguna vez vividas, un recuerdo de los que murieron y cuyos restos mortales aún no han sido hallados.

Proceso de duelo

Los familiares de las personas desaparecidas dicen sentir la misma angustia y soportar las mismas dificultades psicológicas. Muchos familiares se sienten aislados de sus comunidades u obligados a cumplir un papel adicional para reemplazar a la persona desaparecida. Con frecuencia se sienten culpables de haber sobrevivido. Dicen que las personas desaparecidas, sin una tumba ni un lugar donde recordarlas, no tienen nombre ni lazos con la comunidad a la que alguna vez supieron pertenecer.  

Los rituales, como las conmemoraciones y los funerales, marcan la separación respecto de la persona desaparecida y dan a la familia la oportunidad de despedirse de ella y honrarla.

En todo el país, los familiares insisten en ejercer su derecho a saber y cumplen un papel fundamental en mantener la cuestión de los desaparecidos entre las prioridades de las autoridades. El CICR continuará brindándoles apoyo, para asegurarse de que su voz sea oída.

Fotos

Munira Subasic y una amiga examinan el libro del CICR  

Bosnia-Herzegovina.
Munira Subasic y una amiga examinan el libro del CICR "Vidas Perdidas".
© CICR

Exposición de fotografías sobre los familiares de las personas desaparecidas. 

Banja Luka, Bosnia-Herzegovina.
Exposición de fotografías sobre los familiares de las personas desaparecidas..
© CICR

Credencial de seguro de salud hallada en una fosa común, con los restos de una persona desaparecida. 

Bosnia-Herzegovina.
Credencial de seguro de salud hallada en una fosa común, con los restos de una persona desaparecida.
© CICR

Exhibición de fotos acerca de familias de personas desaparecidas. 

Banja Luka, Bosnia-Herzegovina.
Exhibición de fotos acerca de familias de personas desaparecidas.
© CICR

Inauguración de la exposición de fotografías del CICR,  

Sarajevo, Bosnia-Herzegovina.
Inauguración de la exposición de fotografías del CICR, "Vidas Perdidas".
© CICR