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Guinea-Bissau: Alarmante situación humanitaria

18-06-1998 Comunicado de prensa 98/24

En África occidental, dos delegados, uno del CICR y otro de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, llegaron a Bissau, capital de la República de Guinea-Bissau, el sábado 13 de junio, víctima de una rebelión militar desde el 7 de junio.

Durante los enfrentamientos que tuvieron lugar en la zona urbana, tanto las fuerzas gubernamentales como los rebeldes utilizaron armas pesadas, y ocasionaron gran número de víctimas civiles. El hospital principal de la capital fue alcanzado por dos granadas. Los delegados han comenzado a evaluar las necesidades de los distintos hospitales de la ciudad y a proporcionar material médico para los que atienden a los heridos. Los voluntarios de la Cruz Roja de Guinea-Bissau se encargan de evacuar heridos y de enterrar a los cadáveres.

Asimismo, los delegados han evaluado las necesidades inmediatas de varias decenas de miles de personas desplazadas, que huyeron hacia el sudoeste de la ciudad debido a los combates. Se han organizado equipos de socorro con voluntarios de la Cruz Roja para distribuir agua potable, así como sales de rehidratación para los más vulnerables. Sin embargo, un importante número de personas desplazadas en el noreste de Bissau está totalmente indigente. El CICR no tiene acceso a estas personas que están al otro lado de la línea del frente, infranqueable a causa de la violencia de los combates. 

El CICR hace un llamamiento a todas las partes implicadas para que respeten el derecho internacional humanitario. Insta además a que hagan una distinción entre las personas civiles y los combatientes y que protejan y respeten a las personas que no participan o que ya no participan en las hostilidades. La Institución recuerda que está prohibido dirigir ataques indiscriminados que pongan en peligro a la población civil, utilizar a esta población como escudo contra los ataques o aterrorizarla. Las personas que ya no participan en las hostilidades, como los combatientes heridos o enfermos, deben ser recogidos y atendidos, y ha de respetarse la vida de los combatientes capturados.

En esta situación de conflicto, el cometido del CICR es organizar y coordinar la acción del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en favor de las víctimas.