La protección de las personas en situaciones de violencia interna
30-06-2008 Entrevista
En enero de 2008, el jefe de la delegación del CICR en Buenos Aires, Michel Minnig, realizó una exposición ante la Comisión de Asuntos Jurídicos y Políticos de la Organización de Estados Americanos sobre la cuestión de la violencia interna. En esta entrevista, explica los principales aspectos de su exposición.
¿Qué motiva la preocupación del CICR ante las situaciones de violencia interna que se viven en la región?
En América Latina y el Caribe, donde felizmente han retrocedido notablemente los conflictos armados, las situaciones de violencia interna llaman cada vez más la atención de la ciudadanía y de las autoridades por las graves consecuencias humanitarias que tienen. En la región, se observan situaciones de violencia tanto en ámbitos urbanos como rurales (que pueden involucrar a comunidades indígenas). Desde el punto de vista del CICR, las situaciones que se observan en las ciudades son cada vez más preocupantes, en términos de seguridad para la ciudadanía y por sus consecuencias humanitarias.
¿Qué se entiende por situaciones de violencia interna?
Si bien no existe realmente una definición jurídica para dichas situaciones de violencia, a veces nos referimos a ellas como disturbios internos o tensiones internas para identificarlas más adecuadamente. Estas situaciones de violencia interna pueden, por ejemplo, tomar la forma de enfrentamientos, tanto en el campo como en la ciudad, entre fuerzas de seguridad y manifestantes, grupos comunitarios entre sí, fuerzas de seguridad y bandas armadas o fuerzas ilegales entre sí.
Sin embargo, cualquiera sea la pertinencia de estas descripciones, es importante para el CICR no encerrarse en definiciones que podrían limitar su campo de intervención humanitaria. El CICR prefiere determinar su actuación frente a estas situaciones no en virtud de una tipología de sus diversas manifestaciones, sino en base a las necesidades humanitarias que generan.
¿Y cuáles son las consecuencias humanitarias de la violencia interna?
Algunas de las consecuencias humanitarias de la violencia interna pueden ser: personas muertas o heridas, inclusive entre los agentes del Estado; detención de personas; desplazamiento de población; personas desaparecidas, amenazas, abusos, destrucción de bienes o de domicilios, entorpecimiento de la vida económica y traumas.
¿Cuál es el fundamento de la acción del CICR en este tipo de situaciones?
El accionar h umanitario del CICR en el marco de conflictos armados regulados por las normas del derecho internacional humanitario es mundialmente conocido, pero tal vez no se conozca con el mismo detalle su posición ante las llamadas situaciones de violencia interna y las tareas que puede desarrollar en esas situaciones.
En esos casos, la intervención del CICR está motivada por la magnitud de las consecuencias humanitarias; por el valor agregado que nuestra acción pueda aportar, en base a nuestra experiencia, nuestra capacidad y nuestra práctica como organización neutral, imparcial e independiente; y por el grado de aceptación de parte de las autoridades.
Para el CICR, estas situaciones de violencia interna, que no pueden ser calificadas de conflicto armado, se encuentran claramente por debajo del umbral de aplicación del derecho internacional humanitario. En estas situaciones, rigen las normas del derecho internacional de los derechos humanos (DDHH) que regulan el uso de la fuerza por parte los agentes del Estado y establecen una serie de garantías mínimas. Podríamos también calificar estas normas básicas de los DDHH como una forma de " principios humanitarios " puesto que, en cuanto a la defensa de la vida y de la dignidad humana, se encuentran tanto en el derecho de los DDHH como en el DIH.
En una situación de violencia interna, donde no cabe aplicar como tales las disposiciones del DIH, la acción del CICR se basa en el derecho de iniciativa humanitaria contemplado en los Estatutos del Movimiento de la Cruz Roja y Media Luna Roja adoptados en el marco de la conferencia internacional que, cada cuatro años, reúne a los miembros del Movimiento con los Estados firmantes de los Convenios de Ginebra.
¿Qué hace el CICR respecto de las situaciones de violencia interna en América Latina y el Caribe?
En América Lati na y el Caribe, el CICR trabaja en varios países afectados por diferentes tipos de situaciones de violencia crónica o intermitente como por ejemplo en Haití, Brasil, Paraguay, Chile, México, Ecuador, Bolivia, El Salvador, Honduras o Guatemala. La respuesta humanitaria del CICR frente a la violencia interna sigue dos patrones paralelos: uno podría ser llamado " preventivo " y el otro " operativo " .
Las tareas desempeñadas en el campo preventivo abarcan las actividades de cooperación con las fuerzas de seguridad y tienen como finalidad la revisión y la adecuación de todas las directrices operacionales o educacionales, en todo lo concerniente a las reglas de los DDHH aplicables al uso de la fuerza. Otra acción preventiva es la sensibilización de los alumnos de nivel de enseñanza secundaria acerca de temas y situaciones que pueden promover una reflexión sobre la violencia y sus consecuencias.
En el campo operativo se realizan las siguientes actividades: diálogo bilateral con las autoridades sobre las consecuencias que pueden desprenderse de un uso inadecuado o desproporcionado de la fuerza; apoyo a las Sociedades de Cruz Roja para fortalecer sus capacidades de intervención en primeros auxilios y evacuación de heridos, visitas a personas privadas de libertad a raíz de las mencionadas situaciones a fin de evaluar las condiciones de detención y trato; apoyo a las autoridades carcelarias a fin de mejorar la gestión de los lugares de detención; y/o desarrollo de programas médico-sociales realizados por la Sociedades Nacionales de la Cruz Roja en zonas afectadas por situaciones de violencia.