Gaza: seis meses después, las labores de ayuda y reconstrucción avanzan con dificultad

Seis meses después del conflicto entre Israel y Gaza, decenas de miles de personas siguen sufriendo, con poca ayuda o ninguna para reconstruir sus vidas. Sin alojamiento fiable ni infraestructura clave, las fuertes tormentas de invierno de finales de 2014 y principios de 2015 han agravado aún más la situación humanitaria en la Franja de Gaza. Los avances de la reconstrucción han sido desesperadamente lentos, mientras que la desaceleración económica y los daños sufridos por hogares y sistemas de agua y saneamiento se suman para hacer extremadamente dura la vida diaria de los habitantes de Gaza.

"La reconstrucción de la Franja es tremendamente lenta", señaló Mamadou Sow, jefe de la oficina del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Gaza. "Las restricciones a la importación de materiales de construcción no ayudan. El CICR y la Media Luna Roja Palestina están aportando ayuda, pero no es suficiente, y miles de personas siguen teniendo problemas para salir adelante. Los civiles siguen sintiendo intensamente el impacto del conflicto. Reconstruir Gaza llevará décadas, pero ahora mismo nuestra prioridad es satisfacer las necesidades de ayuda humanitaria urgentes".

Inmediatamente después del final de los enfrentamientos más duros, el CICR y la Media Luna Roja Palestina incrementaron sus actividades destinadas a dar alojamiento y asistencia básica (alimentos y artículos de cocina, higiene y cama) a más de 140.000 de las personas más vulnerables. El CICR también ha llevado a cabo reparaciones importantes en los sistemas de agua y electricidad, restablecido casi la mitad de los terrenos agrícolas a un estado apto para la labranza, reparado daños en hospitales y dado apoyo psicosocial a los miembros de los equipos de emergencia que estaban exhaustos.

El CICR ha completado, asimismo, su análisis de los efectos generales del conflicto en el plano humanitario, centrándose en particular en cómo libraron ese conflicto ambas partes. Ha transmitido sus conclusiones por escrito a las autoridades pertinentes, mediante informes confidenciales.

Restablecer la provisión de agua y electricidad

Los sistemas de agua y electricidad de Gaza sufrieron graves daños durante el conflicto. Mantenerlos activos sigue siendo un desafío enorme, por la provisión irregular de combustible a la única central eléctrica de la Franja. Sin embargo, la central vuelve a estar operativa, gracias a los esfuerzos del CICR, y aporta al menos doce horas de electricidad al día.

El agua ha sido prioritaria para el CICR, porque la provisión también se vio gravemente afectada por las hostilidades. Junto con la Empresa de Servicio Público de Agua de las Municipalidades Costeras y la junta de agua local de Gaza, el CICR reparó una red de 22 kilómetros y un pozo en el este de Gaza, que abastecen de agua a 600.000 personas. El CICR restableció además la capacidad operativa de las juntas de agua y saneamiento locales, con el aporte de material técnico y la realización de reparaciones.

Los daños sufridos por las estaciones de bombeo de los distritos de Zeitun y Sheikh Radwan, en Gaza, provocaron hace algunos meses inundaciones en un barrio habitado. Mientras tanto, en la ciudad de Bait Hanun, el sistema de cloacas fue destruido en los enfrentamientos del verano. "Ahora estamos renovando las tres plantas de tratamiento de aguas residuales que hay allí y ya hemos reparado la red y las tuberías cloacales", explicó la ingeniera especializada en suministro de agua del CICR, Sara Badei. En total, estas actividades beneficiarán a 140.000 personas.

Recuperar los modos de vida agrícolas

El conflicto no solo destruyó o causó daños a más de dos tercios de los hogares de Gaza, sino que también arruinó hasta 1.800 hectáreas de terrenos agrícolas y sistemas de riego a lo largo de la frontera. También se vieron afectados cables eléctricos, invernaderos, viveros, depósitos y material de labranza.

"Estas comunidades agrícolas han padecido la conmoción de perder no solo sus hogares, sino también su principal fuente de ingresos, con consecuencias terribles", explicó Janeth Idolog, que dirige los proyectos económicos y de medios de sustento del CICR en Gaza. La mayoría de los agricultores no tenía fondos suficientes para lograr que sus tierras volvieran a ser fértiles o reemplazar su material agrícola.

Muchas de las tierras de labranza se tuvieron que limpiar de municiones sin estallar antes de que el CICR pudiera empezar a preparar la tierra para labores agrícolas. Excavadoras del CICR renivelaron 750 hectáreas de tierras agrícolas levantadas en la zona de frontera de 1,5 kilómetros y repararon 15 kilómetros de canales de riego a tiempo para aprovechar la temporada de lluvias. "Estoy muy feliz de que el CICR nos haya ayudado a preparar la tierra para volver a sembrar", afirmó Abu Attaf, cuyos olivos fueron arrancados durante el conflicto. "Ahora voy a poder sembrar trigo. Lo mejor es que no me voy a perder la cosecha de esta temporada".

Alrededor de 1.400 familias recibieron semillas para cultivar trigo y guisantes en 575 hectáreas de terreno despejado, lo que permitirá tener una cosecha de hasta 2.000 toneladas. Además, se están reparando seis pozos que abastecen a 600 familias, así como numerosas tuberías, tanques y sistemas de riego. Esto contribuirá a volver a hacer productivos terrenos agrícolas que son esenciales.

Restablecimiento de la asistencia de salud

En colaboración con el Ministerio de Salud, el CICR ha completado por ahora la reparación de dos de los cinco hospitales –el Hospital Pediátrico Al Dorra y el Hospital de Bait Hanun– que más daños sufrieron durante el conflicto de 2014, y siguen las obras en los tres restantes. El CICR aportó asimismo muebles, equipos médicos y quirúrgicos y elementos para tratar a pacientes con heridas de guerra a nueve hospitales públicos, reparó pérdidas de agua en los quirófanos del Hospital Europeo de Gaza y el Hospital de Al Aqsa y facilitó materiales esenciales a los servicios de ambulancias de Gaza. Además, se llevaron a cabo, en colaboración con el Ministerio de Salud, sesiones de apoyo psicológico para trabajadores de la salud que estuvieron en el frente y se vieron expuestos a situaciones traumáticas durante el conflicto.

El CICR también organizó dos cursos de capacitación para médicos y enfermeros de tres hospitales de Gaza. "El objetivo de este curso era reforzar las aptitudes de atención de traumas del personal de los departamentos de emergencia y de quienes tratan a pacientes con traumas", explicó el cirujano del CICR Charles Philip Barker.

Ayudar a personas con discapacidades

Más de 2.500 personas con discapacidades recibieron rehabilitación física con apoyo del CICR en el Centro de Miembros Artificiales y Poliomielitis, el único centro de ese tipo en Gaza, que da gratuitamente miembros artificiales, dispositivos ortésicos y servicios de rehabilitación.

El CICR se unió además al Comité Paralímpico para patrocinar un torneo de baloncesto en silla de ruedas a fin de fomentar la inclusión social de las personas con discapacidades. El objetivo del evento era concienciar a la población, a través del deporte, sobre las necesidades y la experiencia de las personas con discapacidades. "Hace no tanto tiempo, las personas con discapacidades eran estigmatizadas y se les negaba cualquier oportunidad. La fuerza, el espíritu de equipo y la determinación de los jugadores son una gran fuente de inspiración. A través del deporte, recuperan la energía y la fuerza", señaló Asad Ghannam, líder del equipo de la Media Luna Roja Palestina.

Se organizaron sesiones de formación para 89 participantes del departamento de fisioterapia del Ministerio de Salud, de Handicap International y de la Asociación Palestina de Fisioterapia. También se llevaron a cabo sesiones sobre salud mental y psicosocial, para que el personal del Centro de Miembros Artificiales y Poliomielitis pudiera ayudarlos a abordar no solo su propio sufrimiento sino también el de sus pacientes con discapacidades que son consecuencia del conflicto.

Seguimiento de las condiciones de los detenidos

En septiembre de 2014, el CICR reanudó sus visitas a todos los lugares de detención de la Franja de Gaza, para hacer un seguimiento del trato que reciben los detenidos y de las condiciones en que viven. Las visitas se coordinan con las autoridades de detención palestinas. El CICR trabaja también con la Administración General de Reformatorios y Centros de Rehabilitación y con los servicios de seguridad palestinos para mejorar las condiciones materiales de detención, mediante mejoras de la infraestructura y la donación de artículos esenciales.

Tras el conflicto del verano de 2014, se suspendieron hasta octubre de 2014 las visitas de familiares a detenidos palestinos en centros de detención israelíes. Desde enero de 2015, se han ampliado las visitas para incluir a niños de hasta 14 años.

El CICR ha facilitado nueve visitas de familiares a instalaciones de detención desde octubre de 2014, lo que ha permitido que más de 300 detenidos recibieran visitas de 550 parientes. Además, se han entregado a detenidos de Gaza más de 100 mensajes de sus familiares. El CICR también está haciendo un seguimiento de las solicitudes de varias familias para buscar a seres queridos de los que se separaron por el conflicto.

Colaboración con la Media Luna Roja Palestina

El personal del CICR y 600 voluntarios de la Media Luna Roja Palestina entregaron juntos socorros de urgencia a 140.000 personas cuyos hogares sufrieron daños o fueron destruidos en los enfrentamientos. El CICR también reabasteció las reservas de la Media Luna Roja Palestina con 100.000 litros de combustible y provisiones socorros de urgencia para 750 familias, a fin de mejorar su capacidad de respuesta ante emergencias futuras. Además, la Media Luna Roja Palestina y el CICR han explorado con detenimiento cómo hacer frente con mayor eficacia a cualquier situación de conflicto en el futuro.

El CICR también llevó a cabo un análisis de riesgos conjunto con la Media Luna Roja Palestina en Gaza sobre los servicios de emergencias médicas. Identificaron iniciativas futuras para mejorar la capacidad de respuesta ante los conflictos, como la eliminación de municiones sin estallar y la mejora de la gestión de los cadáveres.

Para más información:
Suhair Zakkout, CICR, Gaza, tel.: +972 59 925 5381 (inglés, árabe)
Nadia Dibsy, CICR, Jerusalén, tel.: +972 526019148 (inglés, árabe, francés)
Cecilia Goin, CICR, Jerusalén, tel.: +972 52 601 9150 (inglés, español)
Sitara Jabeen, CICR, Ginebra, tel.: +41 22 730 2478 o +41 79 536 92 31