Inundaciones en Myanmar: el CICR se suma a las labores de ayuda en Rakhine

Las fuertes y persistentes lluvias que trae el monzón en Myanmar, con la complicación adicional del ciclón Komen el 31 de julio, han provocado aludes e inundaciones en muchas zonas del país. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), en el marco de las actividades de ayuda del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, concentra sus esfuerzos en Rakhine, donde tiene una fuerte presencia operacional debido a la situación de violencia.

En esta entrevista, ManYee, subjefe de la subdelegación del CICR en Sittwe, explica la situación y nuestras actividades de respuesta.

¿Cómo está la situación en Rakhine?

Está muy grave. Sin embargo, la población de las tres ciudades más afectadas, Mrauk-U, Kyauktaw y Minbya, empieza ahora a regresar a sus casas, los mercados vuelven a abrir y se puede pescar de nuevo.

La situación fuera de las ciudades, en las aldeas, todavía no está muy clara. Necesitamos ver qué encuentran los equipos de evaluación una vez que lleguen a esos lugares. Las evaluaciones deberían comenzar pronto, y nos darán más información.

Ya está claro que las personas que se refugiaron en las ciudades están volviendo a sus hogares y se encuentran con que han perdido sus arrozales y van a necesitar semillas para volver a cultivar. También van a necesitar artículos domésticos básicos, como utensilios de cocina, artículos de higiene y otros.

Muchas lagunas también se han contaminado. Así que otra de las tareas urgentes es distribuir agua potable.

¿Cómo se organiza la acción de respuesta del CICR?

Es importante subrayar que nuestra ayuda es solo una parte pequeña de los esfuerzos más amplios de nuestros colegas de la Cruz Roja de Myanmar. Cientos de voluntarios de la Cruz Roja trabajan sin descanso en las zonas afectadas por las inundaciones en Myanmar.

Nosotros concentramos nuestro apoyo en los lugares donde tenemos una presencia fuerte debido a la violencia previa, como Rakhine, y brindamos asistencia a personas de todas las comunidades afectadas.

¿Qué está haciendo el CICR?

Primero, hemos distribuido artículos de primera necesidad, como mantas, colchonetas y lámparas, a personas que se refugiaron en centros de evacuación de la ciudad de Mrauk-U, una de las zonas más afectadas.

Junto con nuestros colegas de la Cruz Roja de Myanmar, apoyamos al Ministerio de Salud al brindarle ayuda para el transporte de personal sanitario a las aldeas y para trasladar al hospital a enfermos y heridos. También hemos reparado hospitales en varias ciudades y distribuido medicamentos y sales de rehidratación.

Al final de la semana, esperamos haber distribuido más de 6.300 kilos de arroz entre 10.000 personas en la zona de Mrauk-U.

Hay más de 100.000 personas que viven en campamentos para personas desplazadas en Rakhine. ¿Esas personas se han visto afectadas?

Sí, lamentablemente los campamentos han resultado afectados. El alojamiento, las letrinas y los centros de aprendizaje han sufrido daños. Tenemos previsto facilitar lonas impermeables a las familias de los campamentos de Sittwe y Buthidaung, cuyos hogares fueron destruidos. Sin embargo, los campamentos no son el foco principal de nuestra ayuda, ya que hay varias organizaciones más que también están activas allí.