Una mujer espera un paquete de alimentos en Alepo Rural, tras haber huido de su hogar en Raqqa.
Una mujer espera un paquete de alimentos en Alepo Rural, tras haber huido de su hogar en Raqqa.
El simple hecho de sobrevivir día a día en medio del conflicto es tremendamente difícil para las personas que antes vivían de manera sencilla y pacífica.
Ofrecer consuelo y apoyo psicológico a las personas desplazadas o que huyen del peligro es un aspecto esencial de la labor de los voluntarios de la Media Luna Roja Árabe Siria.
Latakia, en la costa occidental de Siria, se ha convertido en el hogar de una de las mayores comunidades de desplazados. Muchas personas desplazadas viven con familias de acogida. Al sentirse a salvo, esta niña encuentra tiempo para jugar y sonreír.
Esta pareja huyó a Tartús para escapar de los enfrentamientos y ahora vive en una carpa. “Vendí todas mis pertenencias para trasladar a mi esposo enfermo a Tartús y no quedó nada para comprar los medicamentos que necesita”, explica la mujer.
La distribución de asistencia a menudo ofrece un respiro para las familias que carecen de sostén.
En el caos del conflicto, a menudo las personas mayores quedan olvidadas. En este asilo de ancianos en Alepo, las visitas periódicas de los voluntarios ayudan a las mujeres a sentirse menos solas.
Cuando la asistencia de salud se interrumpe, todos corren más riesgos. Aquí, un médico examina a un niño herido en un puesto de salud de la Media Luna Roja Árabe Siria.
Las mujeres retratadas en las siguientes fotos provienen de diferentes partes de Siria. Todas, desde la abuela más anciana hasta la niña más pequeña, se van visto afectadas de un modo u otro por la crisis humanitaria que comienza a transitar su quinto año. Sus historias se relacionan con pérdidas y miedos, con el alivio de alcanzar la seguridad después de huir del peligro, y también con la inocencia percibida en las sonrisas de sus hijos. Estas historias reflejan las de las mujeres sirias en todas partes. Y todas están unidas, también, por su misma fuerza y dignidad frente a una enorme adversidad.