Comunicado de prensa

Nigeria: 22.000 casos de personas desaparecidas registrados por el CICR tras una década de guerra

Abuya (CICR) - Cerca de 22.000 nigerianos fueron registrados como personas desaparecidas en el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) durante una década de conflicto en el nordeste de Nigeria. Se trata del número de casos de personas desaparecidas más elevado que el CICR haya registrado a nivel mundial.

Cerca del 60 por ciento de estas personas eran menores de edad cuando desaparecieron, lo que significa que miles de padres desconocen el paradero de sus hijos y si están con vida o no.

"La peor pesadilla de una madre o un padre es no saber dónde está su hijo. Esta es la trágica realidad de miles de padres nigerianos, que viven con la angustia de la búsqueda permanente. Todas las personas tienen derecho a saber qué les ha sucedido a sus seres queridos; debemos hacer más para evitar que las familias se separen", dijo el presidente del CICR, Peter Maurer, al culminar hoy una visita de cinco días de duración al país.

En el marco de esta visita, Maurer se reunió con el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari, así como con funcionarios gubernamentales de alto nivel, dirigentes de la sociedad civil y empresarios. Asimismo, se entrevistó con familias afectadas por el conflicto en Maiduguri y Monguno, muchas de las cuales tienen parientes desaparecidos.

Las familias del nordeste de Nigeria suelen quedar separadas al huir de los ataques. Otras tienen familiares que han sido secuestrados o que están detenidos, de los que desconocen el paradero. El CICR trabaja con la Cruz Roja de Nigeria y con otras Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja de la región para buscar a las personas desaparecidas. Lo hacen exhibiendo fotografías, preguntando por el nombre de las personas desaparecidas y recorriendo campamentos y comunidades.

Hasta ahora, se han resuelto 367 casos desde que el CICR recibió los primeros casos en 2013, lo que deja en evidencia las enormes dificultades que conlleva la búsqueda de las personas desaparecidas y el restablecimiento del contacto con sus familiares en Nigeria. Amplias franjas del nordeste del país siguen siendo absolutamente inaccesibles para las organizaciones humanitarias. Por otro lado, los pobladores han tenido que desplazarse muchas veces a raíz de los enfrentamientos, por lo que es más difícil encontrarlos.

"Lo que más me inquieta es que nadie me dice si está vivo o muerto. No sé nada. Cuando cocino para sus hermanos, pienso en él", dice Falmata Amodu, madre de un niño que desapareció en 2013, cuando tenía diez años, huyendo de un ataque. "Durante los tres años que estuvimos en Maiduguri, mi esposo estaba muy angustiado y solía tener pesadillas. Todo el tiempo llamaba a nuestro hijo secuestrado: Alkali, Alkali, Alkali."

Se calcula que dos millones de personas han tenido que abandonar sus hogares en el nordeste de Nigeria. En Monguno, el número de personas internamente desplazadas es de casi el doble que el de la población residente. La asistencia de salud también es motivo de preocupación, ya que el personal y las instalaciones de salud siguen siendo objeto de ataques. Hace casi un año, dos trabajadoras de la salud del CICR, Hawa Mohammed Liman y Saifura Hussaini Ahmed Khorsa, fueron asesinadas tras haber sido secuestradas de una clínica en Rann, estado de Borno. Los ataques contra la asistencia de salud no solo infringen el derecho internacional humanitario, sino que también cercenan el derecho más básico de las personas a recibir asistencia de salud.

"Las familias son la principal víctima de diez años de guerra en el nordeste de Nigeria. Están desgarradas. Muchos niños han muerto o han sufrido amputaciones a raíz de los bombardeos. Sus instalaciones de salud han sufrido ataques despiadados. Sus viviendas y sus pertenencias han sido destruidas. Las familias deben poder estar juntas y, sobre todo, los civiles deben quedar a resguardo de los ataques", dijo Maurer.

Nota para los editores:

El CICR considera que una persona está desaparecida cuando un familiar lo contacta para informarle que están buscándola. El caso se mantiene abierto hasta tanto algún integrante de la red de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja llegue a una conclusión acerca de lo que le sucedió a la persona dada por desaparecida o hasta que la familia comunique que ha encontrado a su pariente.

Para más información:

- Vincent Pouget, coordinador de Comunicación, CICR, Abiyán, +2349087654206, vpouget@icrc.org
- Crystal Wells, delegada de Relaciones con los Medios de Comunicación, CICR Nairobi, +254716897265, cwells@icrc.org
- Aurélie Lachant, encargada de Relaciones Públicas, CICR, Ginebra, CICR Ginebra, +41792446405, alachant@icrc.org