Osetia del Sur: bizcochos para la merienda del Sombrerero Loco

28 julio 2015
Osetia del Sur: bizcochos para la merienda del <i>Sombrerero Loco</i>
Al igual que Alicia y los huéspedes en la famosa merienda, los participantes en el programa de iniciativas microeconómicas del CICR se reunieron en torno a una mesa. Pero no están aquí para tomar el té, sino que quieren aprender más acerca de la gestión de las pequeñas empresas. CC BY-NC-ND / CICR / M. Tedeti

Hace poco, diecisiete personas, con diferentes oficios y de distintas edades, se reunieron para una sesión de formación sobre el modo de administrar una empresa propia. ¿Negocios para principiantes? En absoluto: cada participante ya ha dado los primeros pasos en gestión de empresas, en el marco del programa de iniciativas microeconómicas del CICR.

No hablaremos de Alicia en el país de las maravillas ni de la merienda del Sombrerero Loco. Disculpen ustedes. Pero los sombreros, los sombrereros y los bizcochos sí juegan un papel en nuestra historia...

En otoño de 2014, los participantes siguieron un curso de introducción a la gestión de empresas, ya que contar con una formación básica es un requisito indispensable para obtener este tipo de apoyo financiero del CICR en el marco de sus programas de iniciativas microeconómicas. Ahora, llegó desde Vladikavkaz un grupo de instructores internacionales para comprobar los resultados logrados por sus alumnos en los seis meses transcurridos desde la primera sesión y para enterarse de los problemas con que han tropezado.

Rosa – Tortas y bizcochos

Rosa prepares biscuits to sell at the local school.

Rosa prepara bizcochos para venderlos en la escuela local. CC BY-NC-ND / CICR / M. Tedeti

Al evaluar una solicitud, el CICR presta gran atención a la importancia social del proyecto. El de Rosa ciertamente satisface ese criterio.

"El año pasado, abrí una confitería con el donativo del CICR; comencé a hacer tortas y tartas", dice Rosa, profesora de secundaria en la aldea de Dzau. "Se acercaba el año nuevo, tenía muchos pedidos y empecé a entusiasmarme. Pero después, mermó el interés de los clientes y el número de pedidos se redujo. Acordé con la escuela que yo prepararía bizcochos como postre para los almuerzos de la escuela y que le entregaría dos pedidos a la semana. Eso ayudó a que el proyecto siguiera adelante. Vamos a firmar un contrato con la escuela para el próximo año lectivo".

Inga – Ropa y disfraces

Inga trabaja en la escuela de la misma aldea y su taller de costura es otro buen ejemplo. "Tengo muchos clientes. Apenas me alcanza el tiempo para hacer ropa para todos. La mayoría son maestras de nuestra escuela", dice Inga. "Nuestros estudiantes ganaron el concurso de disfraces en los juegos "Zarnitsa", que se celebran en toda Osetia del Sur, y fue nuestro taller de costura el que hizo sus disfraces".

Elina – Alimentos y bebidas

Elina serves a customer in her small shop, which she has been able to expand with financial help from the ICRC.

Elina atiende a un cliente en su pequeño negocio, que pudo ampliar gracias a la ayuda financiera del CICR. CC BY-NC-ND / CICR / M. Tedeti

Elina pudo expandir el negocio que ya tenía, un pequeño almacén. Con el dinero del CICR, compró dos refrigeradores, lo que le permitió ampliar su gama de productos. "Los productos nuevos se venden bien", dice Elina. "Y ahora que llegó el verano, puedo ofrecer una selección de bebidas frías".

Sombrereros locos

Después de escuchar a los participantes mientras compartían las experiencias adquiridas durante la implementación de sus propios proyectos, los instructores invitaron a todos los presentes a jugar un juego de negocios. Los dividieron en dos grupos: fabricantes y vendedores de sombreros. Los participantes tenían que negociar precios y condiciones, pronosticar las ganancias y prever el pago del alquiler y de los intereses devengados por un préstamo bancario.

Mientras los participantes desempeñaban sus papeles, quedó claro que estos sombrereros eran todo menos locos y que habían superado con creces la etapa de "Negocios para principiantes". Con sombreros, tortas, bebidas y ropa de calidad, no cabe duda de que la merienda será un éxito.

"Toma un poco más de té", dijo la Liebre de Marzo a Alicia muy seriamente. "Todavía no tomé nada", respondió Alicia, con tono ofendido, "de modo que no puedo tomar más." "Quieres decir que no puedes tomar MENOS", dijo el Sombrerero: "es muy fácil tomar MÁS que nada." (De "Alicia en el país de las maravillas", por Lewis Carroll).