El 28 de agosto de 2016, Emmanuel (4), Monika (6) y Victor (12) fueron secuestrados en su aldea, en Sudán del Sur.
"Se los llevaron cerca de las siete de la tarde. A esa hora solemos sentarnos alrededor del fuego. En un momento, escuchamos a un vecino gritar '¡Mis hijos, mis hijos!', y de repente alguien entró y comenzó a golpear a mi marido. Emmanuel lloraba y decía 'baba, baba'. Fue entonces cuando el hombre que había entrado lo vio, lo tomó y escapó corriendo", explica Rosa, la madre de Emmanuel.