Las comunidades fronterizas son una ventana abierta para la Cruz Roja Venezolana seccional Zulia. Cuando llegan los socorristas a dictar los talleres de primeros auxilios, son bienvenidos y recibidos con algarabía y agradecimiento. Lo que están aprendiendo puede ayudar a salvar vidas. La participación de las personas es una decisión voluntaria.
Las recomendaciones sobre el respeto de los principios de la Cruz Roja, en particular el de neutralidad e imparcialidad, la coordinación con las autoridades locales, la búsqueda del apoyo de las comunidades y las buenas prácticas y metodología para el acceso más seguro a las personas vulnerables permiten la implementación del programa de primeros auxilios en unas condiciones más favorables que facilitan las actividades en zonas rurales fronterizas.
Contar con conocimientos básicos en primeros auxilios es una buena herramienta para las personas ante accidentes, incidentes o situaciones de violencia, en tanto se recibe la ayuda médica apropiada. Una pronta estabilización del paciente favorece su recuperación e incluso puede salvar la vida del mismo, lo cual es especialmente apreciado en zonas remotas y con difícil acceso a los servicios médicos.
La Cruz Roja lleva a cabo los talleres de primeros auxilios haciendo referencia a la Atención Integrada a las Enfermedades Prevalentes de la Infancia (AEIPI), el cuidado personal e higiene, la salud preventiva, el desplazamiento y el refugio, los principios de la Cruz Roja y la prevención a través de planes en casos de emergencias y desastres naturales.
Las formaciones permiten acercar a las familias y brindar asesoría a las comunidades o individuos sobre su condición legal en Venezuela. Ayudan igualmente a organizar y responsabilizar a las personas haciendo énfasis en la parte de prevención y promoción de la salud, entendida ésta como un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no sólo como la ausencia de afecciones y enfermedades.
Los responsables de dictar los talleres de primeros auxilios dan importancia a las personas y a la vez las ayudan a fortalecer sus lazos con la comunidad. Para ello es medular la actividad destinada a organizarlos para preparar planes de prevención y rutas de evacuación en casos de desastres. En ese momento se destaca la importancia de cada uno de los miembros de una localidad, así como la relevancia de su interdependencia y del trabajo en equipo.
Los asistentes a las formaciones agradecen que la Cruz Roja haya tenido en cuenta a las comunidades más distantes de los puestos de salud, porque ha habido emergencias en que los afectados fallecieron antes de que pudieran llegar una ambulancia o transporte de los Bomberos o Protección Civil. Ahora pueden estabilizar a una persona e inmovilizarla para su transporte sin necesidad de tener que esperar la llegada de los organismos especializados.
La lejanía de los centros de salud y el estado de los caminos dificultan la movilización en algunas zonas rurales del estado Zulia y convierten en toda una aventura de vida o muerte los traslados suscitados por una emergencia. Ahora existe la posibilidad de actuar antes de llegar al médico y hasta de salvar una vida, relatan quienes ya aprendieron primeros auxilios o recibieron ayuda de las comunidades capacitadas. En particular en época de lluvias, el lapso transcurrido en busca de asistencia puede agravar el estado de cualquier paciente.
“Agradecemos la formación en primeros auxilios pero también en preparación para los desastres, porque hemos aprendido a organizarnos de una manera práctica y sencilla, realizando, por ejemplo, el mapa de la comunidad por sectores de riesgo y donde vive cada uno para así analizar nuestras vulnerabilidades y capacidades de respuesta. Hemos identificado lugares seguros donde podemos reunirnos a modo de refugios en caso de emergencia para disminuir los riesgos y protegernos”, expresó uno de los beneficiarios de los talleres de primeros auxilios.
En el transcurso de los talleres de primeros auxilios no sólo hay lugar para el aprendizaje, sino para las risas y la diversión. Mientras los representantes de las comunidades escuchan atentos a los instructores de la Cruz Roja, sus hijos también tienen un espacio propio. Entre juegos, pinturas, dibujos y sesiones didácticas, los niños comparten su alegría con los voluntarios.
Mientras los padres aprenden primeros auxilios, los niños también reciben conocimientos sobre valores, principios humanitarios y la historia del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja.
En palabras de Carlos Montiel, presidente de la Cruz Roja Venezolana seccional de Zulia, "el CICR no sólo nos ha apoyado financieramente sino que nos ha aportado mucho en materia de seguridad. Los Principios de la Cruz Roja, en particular el de neutralidad e imparcialidad, la coordinación con las autoridades locales de los talleres de primeros auxilios, el apoyo de las comunidades y los pilares del acceso más seguro permiten una implementación del programa en unas condiciones más favorables que facilitan las actividades en zonas rurales cercanas a la frontera".
Los niños y sus padres también se benefician de la asistencia humanitaria distribuida por la Cruz Roja Venezolana seccional Zulia en las zonas que así lo ameritan, a causa de las fuertes lluvias que por temporadas azotan a la región.
La asistencia humanitaria en Zulia es incluso distribuida por vía fluvial, cuando los niveles del agua suben a causa de los aguaceros y es imposible tener acceso de otra forma a las comunidades rurales.
Las localidades venezolanas cercanas a la frontera son receptoras y tránsito de ciudadanos de origen colombiano que cruzan por las llamadas "trochas" y en ocasiones llegan heridos o debilitados por enfermedades y cuadros psicológicos. La Cruz Roja Venezolana seccional Zulia, con el apoyo del CICR, inició en 2009 capacitaciones en primeros auxilios en varias comunidades que fueron seleccionadas por su vulnerabilidad y problemas de acceso a los servicios de atención primaria. Destacamos su labor en ocasión del Día Mundial de los Primeros Auxilios, el 14 de septiembre.
