Los camiones que transportan elementos de asistencia humanitaria son descargados con la ayuda de los detenidos. Durante noviembre, 1.000 detenidos y 200 guardias fueron los beneficiarios de esas distribuciones.
Los guardias de la cárcel controlan todos los materiales antes de la distribución.
La distribución de artículos se lleva a cabo en la cárcel provincial de Balkh en Mazar-i-Sharif, en beneficio de cerca de 900 detenidos y 88 guardias.
Los detenidos hacen fila para recibir su ropa de abrigo en Mazar-i-Sharif.
Las mantas son llevadas a los pabellones en la cárcel de Pul-i-Charki en Kabul.
Los socorros son entregados a los detenidos en la cárcel de Pul-i-Charki.
Imagen de los detenidos con algunos socorros esenciales entregados en la cárcel de Pul-i-Charki; más de 9.000 detenidos y 1.400 miembros del personal en la cárcel recibieron asistencia durante más de cinco días en noviembre.
Un delegado del CICR verifica que cada detenido en el centro de detención de Pul-i-Charki haya recibido los artículos de primera necesidad que necesitan para el invierno. También es una oportunidad para conversar brevemente sobre otros problemas que los detenidos puedan tener.
Ante la inminente llegada del crudo invierno afgano, durante noviembre y diciembre hasta la fecha, cerca de 35.000 detenidos y más de 3.600 miembros del personal en 88 lugares de detención en todo Afganistán han recibido mantas, ropa de abrigo y otros artículos esenciales cotidianos.
Como muchas prisiones afganas carecen de sistemas de calefacción adecuados, las mantas y la ropa les proporcionarán el abrigo que tanto necesitan, mientras que los artículos de higiene básicos como toallas, jabón, cepillos de dientes, pasta dental y detergente contribuirán a hacer más llevadera la vida cotidiana.
Imágenes de la distribución de artículos que el CICR realizó en tres centros de detención: la cárcel de Pul-i-Charki en Kabul y las cárceles provinciales de Helmand y Balkh.