24 de septiembre – Día del Privado de Libertad en Bolivia
CC BY-NC-ND / CICR / G. Negro
Patio principal del penal San Sebastián, Cochabamba.
En 2016 se han propiciado espacios de diálogo y concertación entre autoridades y expertos para elaborar planes de contingencia y formulación de normas y diseños para la construcción de recintos penitenciarios acorde al contexto boliviano.
CC BY-NC-ND / CICR / G. Negro
Muchos de los actuales recintos penitenciarios son infraestructuras antiguas que no fueron planificadas como lugares de detención.
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Restablecer el contacto entre las familias contribuye a que se pueda sobrellevar de mejor manera el aislamiento.
CC BY-NC-ND / CICR / G. Negro
Las personas recluidas son también parte de la sociedad, por lo que es vital que se trabaje la resocialización para asegurar una inserción efectiva una vez concluido el periodo de reclusión.
Un panorama de la situación carcelaria en Bolivia nos presenta Giorgio Negro, fotógrafo del CICR, quien estuvo en dos de los recintos penitenciarios: San Pedro en La Paz, y el Penal de San Sebastián en Cochabamba.
A través de estas imágenes se pueden observar los problemas que enfrentan cada día las personas privadas de libertad, su vida cotidiana, el espacio donde permanecen recluidos, sus penas y sus esperanzas.
El CICR aborda a nivel internacional la problemática que enfrentan las personas privadas de libertad, velando por que se proteja su dignidad, independientemente de la situación legal en la que se encuentren estas personas. Asimismo, el CICR intenta salvaguardar a las personas privadas de libertad de los malos tratos y la violación de sus derechos fundamentales.
En Bolivia, el CICR evalúa aspectos como acceso al agua y al cuidado de la salud, las condiciones de la infraestructura, la formación adecuada del personal penitenciario y en consecuencia trabaja con las autoridades para lograr mejoras tangibles en el sistema penitenciario.
