Los derechos no terminan tras las rejas: el trabajo del CICR con personas privadas de libertad en Colombia
Asimismo, la detención puede provocar la pérdida del contacto entre familiares, en un contexto de incertidumbre sobre el tiempo que la persona detenida pasará en prisión.
Es por eso por lo que, desde hace más de ciento cuarenta años, el Comité Internacional de la Cruz Roja visita y acompaña a personas que están privadas de libertad en medio de conflictos armados y otras situaciones de violencia.
Además de velar por que se respete su vida y su dignidad durante la detención, estas visitas contribuyen a prevenir las desapariciones, los malos tratos y el incumplimiento de las garantías judiciales.
En Colombia, el CICR visita cárceles y centros penitenciarios desde hace más de cincuenta años para que se respeten los derechos de las personas privadas de libertad.
El propósito de esas visitas y del diálogo directo que mantenemos con las autoridades nacionales es que, a pesar de la incertidumbre propia de la detención, las personas reciban un trato digno y respetuoso, permanezcan en contacto con sus familiares y accedan a servicios básicos de agua, higiene, alimentación, infraestructura y salud.
Esa tarea implica capacitar al personal penitenciario sobre los derechos de las personas privadas de libertad y su cumplimiento. A través del trabajo con las autoridades, buscamos abordar tanto las causas como las consecuencias de los problemas que afectan a estas personas.
"No importa por qué están tras las rejas, no importa el delito. Lo que importa es que todos tenemos derecho a la salud, a la educación, al alimento; a una vida digna. Velamos por que esto se cumpla".
Además, prestamos especial atención a las personas con discapacidad, las mujeres, los adultos mayores y los niños que viven con sus madres en prisión. Fuera de las cárceles, estas poblaciones enfrentan un mayor riesgo de que se vulneren sus derechos, por lo que en detención, protegerlos es todavía más necesario y urgente.
¿Por qué lo hacemos?
En los Convenios de Ginebra, se reconoce el derecho del CICR a visitar a los prisioneros de guerra y a los internados civiles en caso de conflicto armado internacional. Impedir que nuestros delegados lleven adelante su cometido constituye una violación del derecho humanitario.
En conflictos armados no internacionales, como es el caso de Colombia, el artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra nos autoriza a ofrecer nuestros servicios a las partes en conflicto. Muchos aceptan nuestra propuesta de visitar a las personas detenidas, en parte, gracias a nuestra trayectoria y experiencia de décadas en este ámbito.
Contacto para medios
Laura Santamaría, CICR, Bogotá
Coordinadora de Comunicaciones
Teléfono: +57 311 491 07 89
Correo electrónico: lsantamariabuitrago@icrc.org
