Rakhine, Myanmar: decenas de miles de personas asistidas pese a las dificultades
El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja prestó asistencia a más de 40.000 personas en Rakhine desde que estalló la violencia el 25 de agosto. A pesar de las dificultades, las personas desplazadas dentro del estado de Rakhine recibieron ayuda, así como también las personas con necesidades urgentes en sus comunidades de origen. Las operaciones de socorro fueron llevadas a cabo conjuntamente por la Cruz Roja de Myanmar, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Federación Internacional).
Además de artículos esenciales como productos de higiene personal, mosquiteros, mantas y lonas impermeables distribuidos a más de 36.000 personas (7.300 hogares), también suministramos alimentos a más de 40.000 personas. Por otra parte, las mejoras relativas al abastecimiento de agua y al saneamiento beneficiaron a miles de personas. A fin de garantizar la continuidad de los servicios de salud, también brindamos apoyo a clínicas móviles y a siete estructuras sanitarias. Asimismo, más de 7.800 personas recibieron asistencia en forma de dinero en efectivo.
"La Cruz Roja ha ayudado, sin discriminación, a las personas desplazadas que se habían visto afectadas por la violencia", dijo el Dr. Mya Thu, presidente de la Cruz Roja de Myanmar. "Nos sentimos honrados de que el gobierno nos haya solicitado intensificar nuestra labor de acuerdo con nuestros principios humanitarios y nuestras normas estrictas para ayudar a los necesitados."
Rápidamente, hemos ampliado nuestras actividades operacionales para asistir a tantas personas afectadas por la crisis como fuera posible, a pesar de las dificultades, como los riesgos de seguridad, la ubicación remota de los necesitados, la infraestructura deficiente y las inclemencias del tiempo. Todos los medios de transporte aéreos, fluviales y terrestres se utilizan para evaluar las necesidades y entregar la ayuda lo más urgentemente posible.
El jefe de la delegación del CICR en Myanmar, Fabrizzio Carboni, dijo: "Junto con nuestros asociados hemos llegado a un número significativo de personas, pero las necesidades son inmensas y queda mucho más por hacer. Hacia fines de 2017, prevemos ayudar a cerca de 180.000 personas. Si bien es fundamental que reciban asistencia, también es importante que se respeten sus derechos jurídicos y protección; instamos a todos quienes participan en la violencia que respeten el imperio de la ley."
"Estamos haciendo todo cuanto está a nuestro alcance para asistir a las personas necesitadas", dijo Joy Singhal, responsable de la Federación Internacional en Myanmar, y agregó: "Pero no podemos hacerlo solos. Esperamos que otras organizaciones humanitarias puedan renovar su compromiso para satisfacer las nuevas necesidades existentes y urgentes."