“Todos querían a Kennedy”: amigos recuerdan al conductor de camiones asesinado en Sudán del Sur
El 8 de septiembre, Lukudu Kennedy Laki Emmanuel fue asesinado mientras desempeñaba su labor en Sudán del Sur. Como conductor de camiones del CICR, Kennedy llevaba artículos de primera necesidad para ser entregados cuando el convoy de camiones quedó en medio de un tiroteo.
La trágica muerte de Kennedy dejó consternados a sus familiares y amigos.
Pedimos a amigos y colegas de Kennedy en la delegación que compartieran su recuerdo de quien trabajaba para que la ayuda llegara a las comunidades más necesitadas.
Safi John Jamba, conductor de camiones del CICR durante 6 años: Para mí, Kennedy no era un colega, sino un hermano. Nos conocíamos desde pequeños, pues crecimos juntos en un campamento en Uganda. Pese a que trabajábamos para distintas organizaciones, cada vez que nos encontrábamos la pasábamos de maravillas.
Mi recuerdo más vívido de él: Mi primer hijo y uno de los gemelos de Kennedy se llaman Juma. Me dijo: "Trátalo como si fuera tuyo. Cuida de los dos Jumas." Hasta ahora, nunca me había dado cuenta de lo que quiso decir.
Kennedy era un ser tierno, bondadoso y divertido. Siempre trataba de protegerme en las misiones que hacíamos juntos al terreno, hacía bromas durante todo el camino y me hacía sentir seguro. La manera en que se acercaba a hablar sobre el CICR con los portadores de armas me inspiraba confianza.
Isaac Lumago, conductor de camiones del CICR: La personalidad enigmática de Kennedy le hizo ganar muchos amigos. Su círculo social era enorme. Pero una vez que te convertías en su amigo, él jamás te olvidaba. Siempre me sentiré orgulloso de haber sido su amigo.
Mi recuerdo más vívido de él: Kennedy creaba un entorno agradable donde sea que fuera. Hasta apoyaba económicamente a sus amigos cuando ellos lo necesitaban.
Kuro Abusala Said, supervisor de Kennedy en el departamento de parque móvil: Kennedy era una persona extraordinaria. A nadie le podía caer mal. Supervisar a Kennedy era lo más fácil del mundo, pan comido. Algunas personas dicen que hay que sonreír siempre, como si emprendiéramos el camino a casa.
Estoy seguro de que Kennedy está en casa ahora.