Para muchas comunidades en zonas remotas de Somalia, el acceso a la salud es una lucha constante. En ciertas regiones, hay muy pocos centros médicos, de modo que, a veces, las personas deben recorrer cientos de kilómetros para recibir tratamiento. Los conflictos armados, los enfrentamientos entre tribus y los efectos devastadores del cambio climático —como sequías e inundaciones— solo empeoran la situación. Estos factores llevan al desplazamiento poblacional y dificultan el acceso al agua y a los alimentos, y esto hace que muchos se enfermen.
En septiembre de 2024, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Somalia se asoció con la Sociedad de la Media Luna Roja Somalí para instalar cinco clínicas móviles en el país.