Irak: graves dificultades en el acceso al agua potable

El caudal de los ríos Tigris y Éufrates, que suministran la mayor parte del agua de Irak, está disminuyendo lentamente y, en algunas zonas, esos ríos han dejado de ser una fuente segura de agua potable. En todo el país, la disminución del caudal de los ríos tiene graves consecuencias en el funcionamiento de las plantas potabilizadoras. También afecta los acuíferos subterráneos, en los cuales aumenta la salinidad del agua. A menudo, esa agua no es apta para el consumo humano y ni siquiera puede utilizarse en la agricultura.

Las inestables condiciones de seguridad en algunas zonas y los aumentos en el precio de los combustibles complican aún más la situación de los servicios, de por sí escasos. El crecimiento y los desplazamientos de la población también son factores que hacen sentir su peso en los servicios. En muchos lugares, el problema se agrava debido a la falta de ingenieros calificados y del personal necesarios para mantener y reparar las instalaciones de abastecimiento de agua y de saneamiento. La sequía que asoló el norte de Irak, en 2008, afectó seriamente a numerosas comunidades agrícolas.

Durante los últimos diez años, el promedio de las precipitaciones ha sido muy inferior al registrado en décadas anteriores. En el norte, los sistemas de agua alimentados por manantiales y acuíferos someros se han agotado y, a menudo, su caudal no alcanza para satisfacer la demanda. Aunque, en 2009 y 2010, en muchas localidades las lluvias han sido más abundantes, los bajos niveles de agua siguen afectando la producción agrícola. Por esta razón, Irak necesita importar mayores cantidades de arroz y de trigo . A causa de la menor disponibilidad de agua de buena calidad, es de fundamental importancia administrar apropiadamente los recursos existentes. 

Debido a que algunas grandes zonas residenciales suburbanas se han desarrollado sin contar con la infraestructura adecuada y omiten utilizar los servicios de las plantas de tratamiento de aguas residuales, éstas se descargan en ríos y lagos sin haber sido tratadas. Muchos barrios se degradan por la presencia de zanjas y lagunas de agua contaminada y maloliente. Según estimaciones recientes de las Naciones Unidas, aproximadamente el 83% de las aguas residuales se descarga en ríos y cursos de agua.

El funcionamiento de las instalaciones de tratamiento y distribución de agua es perturbado por los frecuentes cortes de energía. Actualmente, Irak produce unos 6.000 MW de electricidad por día, mientras que la demanda se estima en 10.000 MW. Los centros de salud, las instalaciones de abastecimiento de agua y de saneamiento, así como otras infraestructuras en muchas partes del país siguen recurriendo a generadores de reserva para satisfacer sus necesidades de energía eléctrica.

Los sistemas de distribución de agua que son viejos o que no reciben el mantenimiento apropiado se deterioran aún más a causa de las conexiones ilegales y de las cañerías de baja calidad instaladas en los hogares. Las fugas ocasionan la pérdida de grandes volúmenes de agua y frecuentemente causan contaminación. Según las Naciones Unidas, casi la mitad de los iraquíes que residen en zonas rurales carecen de agua potable. El Gobierno de Irak estima que el 24% de la población, es decir, uno de cada cuatro iraquíes, carece de acceso al agua potable.

" El acceso fiable a cantidades suficientes de agua de buena calidad sigue siendo un grave problema para grandes sectores de la población " , dijo Julien Le Sourd, coordinador de agua y hábitat del CICR en Irak. " El CICR está hacien do grandes esfuerzos para paliar esta situación, reparando y mejorando los sistemas de suministro de agua y de saneamiento. Realizamos estas tareas en colaboración con las autoridades; por otra parte, proporcionamos formación al personal de mantenimiento que trabaja en las plantas de tratamiento de agua " .

En marzo y abril, los ingenieros del CICR:

• Finalizaron los trabajos en la planta de agua de Ashty, en la gobernación de Erbil, que proporciona agua potable a unas 10.000 personas que viven en las aldeas vecinas.

• Construyó una unidad de emergencia en el hospital de Qala't Salih (50 camas), en la gobernación de Missan.

• Reforzó la capacidad de almacenamiento de agua potable y del agua utilizada por el sistema de enfriamiento del Medical City Hospital, en Bagdad. El hospital aloja a 1.400 pacientes hospitalizados y atiende a unos 10.000 pacientes ambulatorios por día.

• Renovó un centro de atención primaria de la salud que trata a unos 400 pacientes por día en Sadr City, Bagdad;

• Conectó la escuela del campamento de personas desplazadas de al Rahma, en la ciudad de Nayaf (1.000 personas, entre alumnos y docentes), a las redes municipales de agua y electricidad.

• Realizó el suministro y la instalación de un nuevo refrigerador de morgue, con capacidad para 12 cadáveres, en el Hospital General de Beiji, gobernación de Salah Al Din.

• Suministró agua mediante camiones cisterna a 4.500 personas desplazadas en Sadr City y a 340 personas en Husseinia y Ma'amil, al Hospital General Al Imam Ali y al Hospital Fatma al Zahra, todo ello en la gobernación de Bagdad, y a 360 personas en el campamento de Qalawa Quarter, en Sulaimaniya. 

• Instaló un equipo para el llenado de las bolsas de agua que se distribu yen en situaciones de emergencia, en la planta de tratamiento de agua de Al Wathba, en Bagdad;

• Reparó la planta de tratamiento de agua de Hindiyah, en Karbala, que abastece agua a unas 125.000 personas.

• Instaló una bomba de gran capacidad en la planta de tratamiento de agua de al Fadhliya, gobernación de Thi Qar, que suministra agua potable a 82.000 personas.

• En colaboración con los ingenieros de los Servicios Correccionales de Irak, analizó 11 centros de detención bajo la autoridad del Ministerio de Justicia, evaluando las necesidades y recomendando mejoras para la prestación de los servicios esenciales (agua, electricidad, saneamiento).

  Ayuda para las personas vulnerables  

El CICR mantuvo el apoyo que presta a las personas que afrontan dificultades especiales para ganarse la vida y mantener a sus familias, como las mujeres jefas de familia, las personas con discapacidades y las personas desplazadas:

• Más de 2.300 familias desplazadas encabezadas por mujeres, en las gobernaciones de Diyala, Salah Al-Din y Nínive, recibieron paquetes de alimentos para un mes y artículos de aseo.

• Unas 2.100 personas desplazadas en marzo, de Mosul a Hamdanya y Tilkaif, recibieron paquetes de alimentos y arroz.

• Se proporcionó a 61 personas discapacitadas en las gobernaciones de Erbil, Dohuk y Nínive ayuda en la forma de proyectos microeconómicos que les permitieron iniciar pequeñas empresas y recuperar la independencia económica. Hasta ahora, han recibido este tipo de ayuda 459 personas discapacitadas, en el marco de un programa iniciado en 2008.

  Asistencia a hospitales y centros de rehabilitación física  

Los centros de salud iraquíes siguen beneficiándose del apoyo del CICR. A fin de ayudar a las personas discapacitadas a reintegrarse en la comunidad, el CICR ofrece servicios de ortopedia y de rehabilitación física. En marzo y abril:

• Seis hospitales y tres centros de atención primaria de la salud recibieron insumos y materiales médicos.

• 25 médicos y 28 enfermeras y enfermeros participaron en un curso de formación sobre el fortalecimiento de los servicios de urgencia, dictado en el Hospital Escuela Al Sadr en Nayaf y en el Hospital de Urgencias de Sulaimaniya. 

• Dos personas del Ministerio de Educación Superior e Investigación Científica, dedicadas a la enseñanza en el ámbito de la ortopedia, viajaron a Gran Bretaña con el patrocinio del CICR a fin de recibir formación avanzada en el Centro Nacional de Ortopedia.

  Visitas a detenidos  

Los delegados del CICR siguieron visitando a personas detenidas con el fin de evaluar las condiciones de detención y el trato que reciben. En todos los casos, el CICR comparte sus conclusiones y recomendaciones de manera confidencial con las autoridades detenedoras. En marzo y en abril, el CICR visitó a personas detenidas:

• En la Dirección de Lucha contra el Terrorismo y en Tasfirat Nayaf, gobernación de Nayaf.

• En las cárceles de Mina y Samawa, gobernación de Basora. 

• En la Dirección de Lucha contra el Terrorismo de la gobernación de Kirkuk.

• Bajo la custodia de Estados Unidos, en Remembrance II, gobernación de Bagdad. 

• En cuatro prisiones y una comisaría, en las gobernaciones de Erbil, Dohuk y Sulaimaniya.

En los Centros Correccionales Hilla I y II, unos 1.550 detenidos recibieron colchones y elementos recreativos, como mesas de ping pong y pelotas de fútbol y de voleibol.

El CICR se esfuerza especialmente por restablecer y mantener el contacto entre las personas detenidas y sus familiares. En marzo, ayudó a seis familias iraquíes a trasladarse a Kuwait para visitar a sus parientes que están detenidos en ese país desde 1991. Además, en el mes de marzo, facilitó el intercambio de unos 10.500 mensajes de Cruz Roja entre personas detenidas y sus familiares en Irak y en otros países.

En marzo y abril, el CICR respondió a más de 3.600 solicitudes de personas que pedían información acerca de familiares detenidos. También entregó a ex detenidos 220 certificados, que les permitirán hacerse acreedores a los beneficios de la seguridad social. 

A pedido de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, el CICR expidió 73 títulos de viaje para refugiados palestinos residentes en Irak, que les permitirán reasentarse en otros países.

  Averiguar el paradero de las personas desaparecidas  

El CICR apoya los esfuerzos de las autoridades por averiguar lo que pasó con las personas que desaparecieron en relación con la guerra Irán-Irak y la Guerra del Golfo (1990-1991). También ayuda a formar a profesionales forenses en la identificación y tratamiento de restos humanos, y les proporciona con regularidad los equipos necesarios.

En marzo y abril:

• El Subcomité Técnico de la Comisión Tripartita, que tramita los casos de personas dadas por desaparecidas en relación con la Guerra del Golfo (1990-1991), celebró su 64ª reunión en Kuwait. Dicha reunión fue presidida por el CICR y participaron e n ella representantes de Irak, Kuwait y la Coalición de 1990-1991 (formada por Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Arabia Saudí). La delegación iraquí entregó a la delegación de Kuwait nueve muestras de restos humanos para que, mediante los análisis de ADN pertinentes, se determine si pertenecían a ciudadanos kuwaitíes dados por desaparecidos. En el mes de mayo, el subcomité celebrará una reunión especial sobre distintos aspectos de la ciencia forense.

• Se repatriaron desde Kuwait, bajo los auspicios del CICR, los restos de soldados iraquíes.

  Promoción del derecho internacional humanitario  

En consonancia con su cometido, el CICR promueve el cumplimiento de las normas del derecho internacional humanitario (DIH), y recuerda a las partes en los conflictos su obligación de respetar a las personas civiles. En marzo y abril, la Institución organizó seminarios y presentaciones sobre el DIH para diferentes públicos en todo Irak.