República Democrática del Congo: hechos y cifras correspondientes a 2012

Prevención de la violencia contra la población civil

En 2012, el CICR continuó sus esfuerzos por proteger a la población civil de las consecuencias de los conflictos armados y de la violencia, para lo cual incrementó su presencia cerca de las poblaciones de las zonas afectadas y fortaleció el diálogo confidencial con los actores armados estatales y no estatales. Sobre la base de presuntas violaciones del derecho internacional humanitario observadas por sus equipos en el terreno, el CICR intervino casi de forma cotidiana ante las partes presentes. Se dio seguimiento a cada una de las intervenciones.

Protección de las personas privadas de su libertad

A fin de promover un trato humano y condiciones de detención conformes a las leyes congoleñas y a los estándares internacionales, en 2012 el CICR:

• efectuó 370 visitas a más de 17.000 detenidos en un centenar de lugares de detención civiles o militares;
• siguió individualmente los casos de 1.600 detenidos, a los que ofreció la posibilidad de mantener contacto con sus familiares gracias a los mensajes de Cruz Roja.

Restablecimiento del contacto entre familiares separados por los conflictos

Debido a los desplazamientos de población, los miembros de muchas familias quedaron separados, a veces del otro lado de las fronteras congoleñas. En colaboración con la Cruz Roja de la RDC, el CICR hizo todo lo necesario para que los miembros de las familias separadas retomaran el contacto o pudieran reunirse, en República Democrática del Congo o en un país limítrofe.

En 2012, el CICR:

• reunió con sus familias a más de 940 niños separados de sus seres queridos y a 270 niños que habían estado enrolados en las fuerzas y los grupos armados;
• visitó a varios cientos de niños con pasado militar, hoy de regreso con sus familias, a fin de asegurarse de que se hubieran integrado bien en su entorno. Un centenar de esos niños recibieron artículos escolares o la ayuda necesaria para que su familia iniciara un pequeño comercio o una actividad agrícola;
• recogió y distribuyó más de 46.000 mensajes de Cruz Roja.
• A fines de 2012, alrededor de 1.400 niños no acompañados por ningún familiar, 300 de los cuales habían estado enrolados en las fuerzas y los grupos armados, aún seguían esperando reunirse con sus seres queridos. Actualmente, viven en centros de tránsito o con familias de acogida.

Mejora de los cuidados de salud

Al mismo tiempo que mantuvo sus actividades de asistencia habituales en favor de los centros de salud y hospitales del país, en 2012 el CICR:

• brindó tratamiento médico a unos 1.700 heridos de bala;
• evacuó cerca de 340 heridos de guerra hacia una estructura médica adecuada;
• envió, en noviembre de 2012, dos equipos quirúrgicos que efectuaron 206 operaciones;
• abasteció de medicamentos y material a siete estructuras sanitarias en Kivu Norte y Kivu Sur;
• prestó servicios de rehabilitación física a más de 760 heridos de guerra;
• dio apoyo a 42 casas de escucha, que reciben y orientan a las víctimas de violencia sexual;
• suministró medicamentos a los dispensarios de 19 cárceles (en las que se atienden más de 31.000 consultas);
• brindó asistencia nutricional terapéutica a unos 1.000 detenidos que padecían desnutrición severa.

Acceso al agua y a condiciones adecuadas de saneamiento

Para garantizar un mejor acceso al agua potable, el CICR trabaja en colaboración con las estructuras locales, la REGIDESO, el Servicio Nacional de Hidráulica Rural o la Cruz Roja de la RDC. En las zonas rurales, el CICR se asocia con los servicios de suministro de agua locales.

En 2012, el CICR:

• mejoró varias redes de distribución de agua potable en beneficio de dos millones de personas en Kivu Norte, Kivu Sur y la Provincia Oriental;
• envió agua potable para 90.000 desplazados que huyeron de los combates en Rutshuru y para los habitantes de Goma y sus alrededores;
• construyó catorce centros sanitarios y rehabilitó muchas otras estructuras sanitarias;
• rehabilitó las cocinas y mejoró el abastecimiento de agua potable y las instalaciones sanitarias en dieciséis cárceles.

Satisfacer las necesidades esenciales y preservar los medios de sustento

El CICR realiza actividades para mantener o restablecer los medios de sustento que permiten a las familias de las víctimas de los conflictos y de la violencia armada satisfacer sus necesidades esenciales.

En 2012, el CICR:

• distribuyó artículos domésticos para unas  200.000 personas (personas desplazadas, de regreso a sus hogares u otras personas vulnerables) y asistencia alimentaria a más de 220.000 personas;
• distribuyó semillas y herramientas para unas 79.000 personas, esquejes de mandioca resistentes a la enfermedad del mosaico para 100.000 personas y brindó apoyo a más de 6.700 personas para que rehabilitaran sus estanques piscícolas;
• organizó ferias donde 25.000 personas pudieron abastecerse de productos esenciales;
• benefició a 3.800 detenidos de ocho cárceles con un programa de asistencia nutricional gracias a los productos cultivados en los jardines penitenciarios.

Colaboración con la Cruz Roja de la RDC

En 2012, el CICR:

• continuó brindando apoyo financiero a la Cruz Roja de la RDC y le entregó paquetes con artículos para intervenciones de urgencia, 300 botiquines de primeros auxilios y material para la gestión de los restos mortales;
• formó voluntarios en materia de gestión de restos mortales;
• capacitó en socorrismo a más de 700 voluntarios;
• apoyó las actividades de prevención del cólera entre las poblaciones desplazadas en Kivu Sur;
• apoyó a la Cruz Roja de la RDC en las tareas de rehabilitación de fuentes de agua en cinco aldeas;
• concientizó a grupos de voluntarios sobre los riesgos que conllevan los restos de explosivos de guerra.

Promoción del derecho internacional humanitario

El CICR se esfuerza por dar a conocer las normas del derecho internacional humanitario y su acción humanitaria neutra e imparcial entre los miembros del ejército, la policía, los grupos armados y las autoridades civiles.

En 2012, el CICR:

• invitó a más de 13.000 miembros de las fuerzas armadas y de seguridad a participar en sesiones interactivas con estudios de casos adaptados al contexto local. Más de cien miembros de grupos armados participaron en sesiones similares, y algunos de ellos recibieron una formación en primeros auxilios;
• mantuvo un contacto regular con las autoridades y los representantes de la sociedad civil a fin de intercambiar opiniones, difundir las actividades del CICR y lograr que se respete a la Institución. .