Declaración

Declaración de Peter Maurer, presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), al término de cinco días de visita en Damasco y el nordeste de Siria

En el marco de ese viaje, Maurer visitó Hasaka y el campamento de Al Hol.

He sido testigo de las condiciones de vida extremas del campamento de Al Hol y del esfuerzo desplegado para recibir a las decenas de miles de personas que llegan en masa al campamento. Hoy se albergan allí más de 74.000 personas; las necesidades son enormes, y el lugar está saturado.

La atención mediática se ha concentrado en la situación de los combatientes extranjeros y sus familias. Sin embargo, ellos representan un pequeño porcentaje de las personas alojadas en Al Hol y en otros campamentos. Alrededor del 90% de quienes llegan al lugar son mujeres y menores de edad, que, en muchos casos, han atravesado experiencias sumamente traumáticas. En las últimas semanas, decenas de niños han fallecido a causa del frío y de las condiciones de vida en Al Hol.

Nuestro equipo fue testigo del caso de una mujer de 24 años que había dado a luz en su trayecto hacia el campamento. Sus otros hijos dormían junto a ella, en el piso. A diez horas de haber llegado, junto a muchísimas otras personas, seguían a la espera de agua, alimentos y una tienda de campaña donde dormir. Si bien ella apenas hablaba, logró contarnos que habían llevado a su bebé recién nacido al médico.

Todas estas personas son seres humanos que tienen derecho a recibir un trato humano. No dejemos que el exaltado discurso en torno de los combatientes extranjeros nos impida ver el sufrimiento ocasionado por la emergencia humanitaria que se vive hoy en el nordeste de Siria.

Es difícil exhibir valor moral ante la ansiedad pública y la presión política. Pero nosotros estamos a la altura de las circunstancias. Los Convenios de Ginebra, de cuya firma se cumplen 70 años este 2019, no dejan a nadie fuera del derecho, sin importar qué delitos pueda haber cometido una persona.

Instamos a los Estados a manifestar en sus actos ese valor moral. A tratar a todas las personas con humanidad y dignidad, según el derecho y las garantías del debido proceso. A mantener unidas a las familias, siempre que sea posible. A poner a disposición los recursos necesarios para una asistencia humanitaria suficiente. Y a resistir la presión de utilizar un discurso deshumanizante, que no hace más que perpetuar el problema.

En el campamento de Al Hol, junto con la Media Luna Roja Árabe Siria, estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para entregar alimentos a las personas recién llegadas, habilitarles el acceso al agua, poner a su disposición tiendas de campañas y atención médica esencial, así como para restablecer el contacto entre familiares. Sin embargo, es evidente que se necesita mucho más: más refugio, más alimentos, más agua potable, un mejor saneamiento y más servicios de salud.

En el resto de Siria, a ocho años del inicio de este desastroso conflicto, la violencia no ha llegado a su fin. Se ha registrado una escalada reciente de los enfrentamientos y de la violencia en algunas zonas del interior de Idlib y en los alrededores. Decenas de miles de personas han sido desplazadas como consecuencia de un rebrote de las hostilidades. Cualquier resurgimiento de la violencia empeorará aún más su situación. 

Asistencia en el campamento de Al Hol

Resumen de la asistencia prestada por el CICR junto con la Media Luna Roja Árabe Siria en el campamento de Al Hol:

  • suministro de 9.000 comidas por día a las personas recién llegadas;
  • transporte de 100.000 litros de agua potable por día y distribución continua de botellas de agua potable;
  • 176 inodoros instalados;
  • apoyo a los servicios de salud: desde el 6 de marzo, 700 personas han recibido atención y otras 400 personas heridas han recibido primeros auxilios gracias a los servicios de un convoy médico compuesto por una unidad móvil de salud de la Media Luna Roja Árabe Siria con apoyo del CICR y dos ambulancias. El 19 de marzo, comenzaron a funcionar otras 4 unidades móviles de salud.

 Restablecimiento del contacto entre familiares

  • En Al Hol y en otros campamentos, el CICR presta servicios para ayudar a las personas a restablecer o mantener el contacto con familiares de quienes no tienen noticias o han sido separados a raíz del conflicto. Desde principios de 2018, el CICR ha recopilado 1.661 mensajes de tipo "sano y salvo" y mensajes de Cruz Roja con noticias de familiares que se hallan en los campamentos, y entregado 655 de esos mensajes.

 Visitas a personas detenidas

  • El CICR también visita a personas detenidas en relación con el conflicto librado en el nordeste de Siria que se hallan en algunos lugares de detención bajo la órbita de la administración local. En esas visitas, presta servicios humanitarios, como el restablecimiento o el mantenimiento del contacto entre familiares. El diálogo que mantiene el CICR con los actores relacionados con la detención es confidencial y gira en torno de la prestación de servicios esenciales, así como de la observación de las condiciones de detención y del trato dispensado a las personas detenidas.

Para más información:

Sara Alzawqari, CICR, Beirut, + 961 3 138 353
Jenny Tobias, CICR, Ginebra, +41 79 447 37 26
Matthew Morris, CICR, Londres, +44 7753 809471
Frederic Joli, CICR, París, +33 6 20 49 46 30
Galina Balzamova, CICR, Moscú, +7 903 545 35 34
Elizabeth Gorman Shaw, CICR, DC, +1 202 361 1566
Pat Griffiths, CICR, Canberra, +61 418 485 120