Imágenes de Siria: escapar de Guta Oriental

  • En el piso de una central eléctrica destruida, parece que uno estuviera envuelto en un manto de sufrimiento humano. Este lugar está en ruinas, al igual que las vidas de sus nuevos residentes. Es uno de los muchos refugios temporales que acogen a miles de sirios que huyeron de Guta Oriental tras años de violencia.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • Um Mohammed es una de las tantas personas que escaparon. Atravesó siete largos años de padecimiento. Dice: “He sufrido mucho, sobre todo cuando mi marido murió. Era todo tan caro, más allá de lo imaginable. Podría pasar horas describiendo la tragedia que vivimos allí”. Um Mohammed está a cargo de diez niños: ocho propios y dos pequeñas niñas que quedaron huérfanas. Estas niñas estarían perdidas, solas y atemorizadas en Siria si no fuese por el acto desinteresado de esta mujer.
  • Todos ellos viven aquí, en un pequeño cuarto de madera que improvisaron. Es uno de los tantos refugios que se están construyendo uno al lado del otro sobre el piso duro y frío del edificio principal de la central eléctrica. Los cuartos, construidos por organizaciones como el CICR y la Media Luna Roja Árabe Siria, intentan hacer la vida un poco más llevadera. Cada uno tiene quizás el tamaño de un dormitorio doble de París, Londres, Beirut o Nueva York.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • Para muchos, el recorrido hasta estos refugios fue arduo, lleno de temor, pero también de esperanza. Esperanza de que la seguridad llegaría finalmente. Muchos vinieron aquí con nada más que la ropa puesta y el calzado gastado. Algunos ni siquiera tenían calzado.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • Se puede sentir el sabor del polvo y el olor del humo de cigarrillo en el aire. Se oye el llanto de los bebés. Los hombres lo toman a uno del brazo para que uno vaya a ayudarlos con algo en algún lugar. Y en sus ojos puede verse desesperación total. Donde sea que uno mire, los sentidos sufren una embestida dentro y alrededor de estos refugios en Damasco Rural.
  • Durante el día, visitamos cuatro refugios y nos encontramos con innumerables personas que tienen una historia para contar: el profesor de inglés de Duma que sobrevivió a la violencia intensa, y que sabía que había pocos medicamentos y muy pocos médicos disponibles si la situación empeoraba.
  • El hombre que en los días buenos comía un pequeño pan con cebada que lavaba con agua sucia hervida, pero que en los días malos tenía que comer alimento para animales triturado, que es lo que normalmente se da de comer a los vacunos.
  • Y los niños para quienes la escuela es un recuerdo lejano. Asignaturas como matemática, historia, ciencias, reemplazadas desde hace tiempo por las lecciones dolorosas aprendidas en la guerra: correr, esconderse, sobrevivir, llorar a los seres queridos.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • En todo Siria, millones de personas continúan afectadas por el conflicto. Los heridos y los muertos se cuentan en cientos de miles. La mitad de los sirios están desplazados, ya sea en el país o en el extranjero. Las familias se han separado. Los que se vieron forzados a huir buscan con desesperación lugares seguros donde refugiarse.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • La población civil y los servicios que necesitan para sobrevivir son objeto de ataques; lo mismo sucede con los médicos y los hospitales. Esto no debe ocurrir jamás. Lo decimos una y otra vez, y continuaremos repitiéndolo. Nuestros mensajes no deben ser ignorados por quienes son parte en el conflicto ni por los que los apoyan en todo el mundo.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • Tal vez sea desagradable escucharlo. Pero, por favor, piense por un momento en todas las personas retratadas en esta galería de fotos y en los millones de sirios que se enfrentan año a año a tremendas adversidades. Imagine cómo es ir a dormir con el estómago vacío en un depósito polvoriento, sobre el piso de una ruidosa fábrica comunitaria, o en una cancha de fútbol en desuso, rodeado de extraños en un lugar que jamás debería ser llamado ”hogar”.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
  • Cuando tenga qué comer esta noche, por favor piense en ellos. Cuando desee las buenas noches a sus hijos, por favor piense en ellos. Y cuando se despierte mañana porque nadie ha destruido el edificio donde usted pasó la noche, por favor vuelva a pensar en ellos.
  • La población siria necesitará de nuestra ayuda por muchos años. Lo que ahora necesitan con urgencia es una solución política duradera que los lleve hacia la paz.
    CC BY-NC-ND / CICR / Matthew Morris
03 mayo 2018

Miles de sirios han huido de Guta Oriental, al noreste de Damasco, tras años de violencia.

Muchos de ellos viven ahora en refugios temporales en zonas aledañas.

Estas son algunas de sus historias.