En México hay una problemática compleja de personas desaparecidas. Según cifras oficiales, se desconoce el paradero de alrededor de 30.000 personas. Ante números tan desalentadores, resulta importante que los servicios forenses del país, encargados, entre otras cosas, de regresar la identidad a las personas fallecidas sin identificar, tengan conocimiento de las mejores prácticas para desempeñar su labor. Esto puede mejorar las posibilidades de que los restos de personas no identificadas sean restituidos a sus seres queridos y no terminen en fosas comunes.
El Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMX) y el CICR organizan, por octavo año consecutivo, el Encuentro Nacional de Servicios Médicos Forenses. En él participarán directores de los servicios periciales y de los servicios médicos forenses de todo el país. Además, en 2017, estarán por primera vez representantes de los ministerios públicos, quienes se encargan de llevar a cabo las investigaciones. Todos se unen con la intención de promover la coordinación, cooperación y responsabilidad compartida en el proceso de identificación de restos y de brindar atención a las familias.
Durante el encuentro, el CICR y el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJCDMEX) dotarán a los participantes de herramientas para desarrollar un plan de acción que les permita contar con registro forense más adecuado para responder de forma eficaz y eficiente a las familias de las personas desaparecidas que padecen la incertidumbre de no saber si su ser querido ha fallecido.
La reunión es una oportunidad de insistir en que a las familias de las personas desaparecidas se les proporcione atención de calidad y respuestas basadas en procedimientos científicos con estándares internacionales, pero adaptados a la situación mexicana, que ofrezcan certidumbre, con dignidad y respeto hacia la persona fallecida.
En septiembre de 2016, el Instituto Nacional Electoral, la Procuraduría General de la República y la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia firmaron un convenio para la identificación de personas desaparecidas por medio de huellas dactilares.
