Antes de que la ciudad pasara a estar bajo el control del M23, las partes en conflicto recurrieron al uso de artillería pesada y de artefactos explosivos. Estos combates, en los alrededores y dentro de Goma, causaron una afluencia masiva de heridos en las instalaciones de salud de la ciudad, en especial en el hospital CBCA Ndosho, donde el CICR lleva a cabo un programa de cirugía de guerra. Entre fines de enero y principios de febrero, los equipos quirúrgicos de ese establecimiento debieron atender a más de 1.200 heridos por armas en un hospital desbordado. Los otros tres hospitales apoyados por el CICR en la región también estaban saturados.
Las fotografías de Moses SawaSawa, tomadas en el hospital a principios de febrero de 2025, nos remontan a la llegada masiva de heridos.