Conferencia Internacional para altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley

13-12-2010 Reportaje

En una época en que las fuerzas de policía asumen un papel cada vez más importante, el CICR amplía sus actividades en las que se conocen como "otras situaciones de violencia". A lo largo de los últimos diez años, la Institución ha intensificado su trabajo con esas fuerzas, tal como confirma la primera Conferencia Internacional para altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley (ICSLEO, por la sigla en inglés), que se celebró en Ginebra del 30 de noviembre al 2 de diciembre de 2010.

     
©CICR/T. Gassmann / ch-e-00678 
   
Ginebra, Conferencia Internacional para altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley – ICSLEO 2010 
               
©CICR/ 
   
Indonesia, Java del Oeste, Kelapa Dua. Firma de un acuerdo entre la brigada móvil de la policía de Indonesia y el CICR para el entrenamiento de la policía de ese país en materia de DIH y derechos humanos. 
               
©CICR/ B. Heger / pe-e-00335  
   
Entrenamiento de la policía en Lima, Perú. Ejercicios prácticos sobre el uso de la fuerza y el respeto de los derechos humanos durante un arresto.  
           

El CICR invitó a funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, así como a expertos en esa temática procedentes de diferentes países, a analizar los retos de la función policial en la época actual y de la integración de las normas y los principios internacionales en las prácticas diarias del mantenimiento del orden.

El evento incluyó una visita a las instalaciones de entrenamiento de la gendarmería de Ginebra, donde los participantes observaron diferentes ejercicios de entrenamiento realizados por la unidad de orden público de la gendarmería.

El diálogo con la policía no es nuevo para la Institución, sino que data de la guerra civil española, en los años 1930. Pero el CICR ha trabajado mucho más con las fuerzas armadas, ante las que ha promovido el conocimiento y el respeto del derecho internacional humanitario (DIH). Dada la importancia que han adquirido las que se conocen como " otras situaciones de violencia " , es decir las situaciones de violencia que no alcanzan el grado de un conflicto, tanto el DIH como las fuerzas armadas suelen ser menos relevantes que el derecho de los derechos humanos y las fuerzas que más participación tienen, es decir la policía. En efecto, los delegados del CICR dialogan cada vez más con la policía sobre el acceso a los detenidos, las condiciones de detención, el trato de los ciudadanos, las desapariciones y el respeto de los derechos humanos fundamentales.

Sin embargo, el CICR no desea enseñar a los policías el comportamiento que deben adoptar al interrogar a sospechosos, controlar multitudes o emplear la fuerza, ámbitos de interés para la Institución. A pesar de que cuenta dentro de su plantilla con un número cada vez más alto de ex policías experimentados, el CICR no puede asumir la responsabilidad de las fuerzas policiales de tomar sus propias decisiones institucionales. La Institución simplemente les recuerda las implicaciones operacionales de los derechos humanos fundamentales en las actividades de mantenimiento del orden. Corresponde a las propias fuerzas policiales integrar los derechos humanos en sus prácticas.

" Es responsabilidad de los Estados entrenar a sus fuerzas de policía y asegurarse de que los derechos humanos fundamentales estén incluidos en sus manuales, programas, ejercicios de entrenamiento e instrucciones " ; dice la doctora Anja Bienert, asesora del CICR en materia de actividades con las fuerzas de policía y de seguridad. " Participamos cada vez más en procesos de esa índole, pero no deseamos convertirnos en entrenadores de la policía o en redactores de sus manuales. Además, es imposible aplicar un enfoque único a países tan diversos. "

  Tiempo de adaptarse  

     

El CICR está adaptándose al trabajo con las fuerzas policiales en un momento en que las propias fuerzas están respondiendo a los cambios en sus países, lo que crea oportunidades para la Institución. " La mayor parte de las fuerzas de policía aquí presentes, incluidas las de mi país, han pasado paulatinamente de la protección del Estado a la protección de los ciudadanos " , dice el coronel Fabio Manhães Xavier, director de la academia de entrenamiento de policías de Minas Gerais, el segundo estado más grande de Brasil. " La mayoría de los oficiales de policía tiene una formación militar y ha tenido que adaptarse a esta nueva filosofía. Los talleres como éste ayudan a generar consenso. "

El evento también fue una oportunidad de mejorar la comprensión del apoyo que el CICR puede prestar a las fuerzas policiales. " Conocía al CICR sólo como un organismo de ayuda " , dice el general Ahmed Khan Toru, jefe de policía de la provincia Jyber Pajtunjwa en el noroeste de Pakistán, donde el CICR realiza muchas actividades. " No sabía que esta Institución también trabajaba en cuestiones relacionadas con la policía. Quisiera que el CICR hiciera en mi provincia lo que ha hecho en Indonesia y Filipinas " (es decir, un programa de cooperación a largo plazo con la policía sobre temas relativos al mantenimiento del orden).

" La conferencia ha añadido una dimensión al diálogo del CICR con las fuerzas de policía y de seguridad " , dijo el doctor Philip Spoerri, director de Derecho Internacional y Cooperación. " Reunió a altos funcionarios encargados del mantenimiento del orden y a expertos de más de quince países para analizar sus experiencias y las lecciones que han aprendido. Les dio un espacio para debatir, aprender unos de otros y generar nuevas ideas. "

El CICR realiza actividades con las fuerzas de policía y de seguridad en más de 80 países en todo el mundo, y la conferencia es una afirmación de su compromiso para seguir alimentando este diálogo constructivo con ellos en el futuro, en concordancia con su misión de aliviar el sufrimiento de las personas afectadas por los conflictos armados y otras situaciones de violencia.