De la batalla de Solferino a las vísperas de la Primera Guerra Mundial

28-12-2004

Durante sus primeros cincuenta años de vida, el CICR llevó adelante una acción humanitaria concertada y coordinada en favor de las víctimas de la guerra, sobre la base del derecho internacional.

El 24 de junio de 1859, durante la guerra por la unidad italiana, los ejércitos franco-sardos se enfrentan a las tropas austríacas alrededor de la aldea de Solferino en Italia del Norte. Ese día, un ciudadano ginebrino, Henry Dunant, trata de reunirse con Napoleón III por cuestiones de orden personal. La tarde de la batalla, Dunant llega a la aldea vecina de Castiglione, en donde se han refugiado más de 9.000 heridos. Día y noche, en la Chiesa Maggiore (Iglesia Mayor) en donde se hacinan unos 5.000 heridos, Durant y las mujeres del lugar les dan de beber, l avan y vendan sus heridas, les distribuyen tabaco, bebidas aromáticas y frutas. Dunant se queda en Castiglione hasta el 27 de junio y luego reanuda su viaje; regresa a Ginebra el 11 de julio. Aunque está afectado por dificultades financieras, no puede olvidar lo que ha visto y, en 1862, publica una obra titulada Recuerdo de Solferino. En él describe la batalla, luego la situación de los heridos en la Chiesa Maggiore y, posteriormente, concluye su relato con una pregunta:  "¿No se podría, durante un período de paz y de tranquilidad, fundar sociedades de socorros cuya finalidad sería prestar o hacer que se preste, en tiempo de guerra, asistencia a los heridos, mediante voluntarios dedicados, abnegados y bien calificados para semejante obra?" . De esta pregunta surgió la institución de la Cruz Roja. Dunant preguntó, asimismo, a las autoridades militares de diferentes nacionalidades si podían formular "¿(...) algún principio internacional, convencional y sagrado que, una vez aprobado y ratificado, serviría de base para sociedades de socorro a los heridos en los diversos países de Europa?" . Esta segunda pregunta da origen a los Convenios de Ginebra.

Se forma un Comité

La obra de Henry Dunant obtiene un éxito enorme; se traduce prácticamente a todos los idiomas de Europa y es leído por las personalidades más influyentes de la época. Entre ellas, el ciudadano ginebrino, Gustave Moynier, abogado, presidente de una sociedad local de beneficencia (la " Sociedad Ginebrina de Utilidad Pública " ). El 9 de febrero de 1863, Moynier presenta las conclusiones de la obra de Dunant a la sociedad que preside. Ésta crea una comisión de cinco miembros a la que encarga de estudiar las propuestas de Dunant.

Esta comisión de cinco miembros -Moynier, Dunant, el general Dufour y los médicos Appia y Maunoir- es el germen del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). Reunida por primera vez el 17 de febrero de 1863, la comisión constata de entrada que los voluntarios imaginados por Dunant sólo podrán actuar eficazmente, sin correr el riesgo de ser rechazados por los soldados, si se diferencian de los simples civiles mediante un signo distintivo y si son protegidos de los combates. Es éste el concepto de la neutralización de los servicios sanitarios y de los enfermeros voluntarios.

El 25 de agosto de 1863, el Comité Internacional decide reunir en Ginebra, bajo su propia responsabilidad, una Conferencia Internacional para estudiar los medios de remediar la falta del servicio sanitario en los ejércitos. Para ello, envía una convocatoria a todos los gobiernos de los países europeos, así como a numerosas personalidades. El 26 de octubre de 1863, el general Dufour inaugura la Conferencia. En ella se reúnen 36 personas, 14 de ellas delegados de gobiernos, 6 delegados de diversas organizaciones y 7 personas que asisten a título privado. Este carácter híbrido, a la vez público y privado, se ha mantenido en las Conferencias Internacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. En efecto, en la actualidad, participan en ellas las delegaciones de las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, las de los Estados Partes en los Convenios de Ginebra, y las de los observadores (principalmente organizaciones no gubernamentales).

La Conferencia de 1863 adopta como base de discusión un " Proyecto de Concordato " , preparado por el Comité Internacional.

La Conferencia concluye tras haber adoptado 10 resoluciones que constituyen el fundamento de las Sociedades de socorros a los militares heridos, embrión de las futuras Sociedades de la Cruz Roja y, más tarde, de la Media Luna Roja.

La resolución 10 encomienda al Comité Internacional el cometido de intercambiar informaciones entre los Comités de las diversas naciones.

El crecimiento de las Sociedades Nacionales

En los meses siguientes, se crean las primeras Sociedades de Socorros: en Württemberg, en el Gran Ducado de Oldenburgo, en Bélgica, en Prusia y, posteriormente, en Dinamarca, en Francia, en Italia, en la región de Mecklemburgo-Schwerin, en España, en Hamburgo y en Hessen.

Por su parte, el Comité Internacional prepara la etapa siguiente, una conferencia diplomática que deberá transformar las resoluciones adoptadas en 1863 en normas convencionales con fuerza de ley para las partes contratantes, es decir, los Estados.

Pero, el 1 de febrero, los ejércitos austro-prusianos invaden Dinamarca. Es el comienzo de lo que se denomina la guerra de los Ducados. El Comité Internacional decide enviar dos delegados al sitio de los enfrentamientos a fin de curar a los heridos y estudiar las posibilidades de aplicar algunas de las conclusiones de la Conferencia de octubre de 1863.

El 6 de junio de 1864, el Gobierno suizo (que había aceptado organizar la conferencia diplomática) dirige una carta de invitación a todos los Gobiernos de Europa, así como a los de Estados Unidos de América, de Brasil y de México.

Adopción del Convenio de Ginebra

La Conferencia sesiona del 8 al 28 de agosto de 1864, con la participación de delegados de 16 Estados. Adopta como base de discusión un proyecto de convenio preparado por el Comité Internacional. El 22 de agosto de 1864, firma el Convenio para mejorar la suerte que corren los militares heridos en campaña. Acababa de nacer el derecho internacional humanitario moderno.

Antes del fin de ese año, el Convenio fue ratificado por varios países: Francia, Suiza, Bélgica, Países Bajos, Italia, España, Suecia, Noruega, Dinamarca y el Gran Ducado de Baden.

Pero una nueva guerra va a someter a una prueba de fuego el recién aprobado Convenio. Se trata de la guerra austro-prusiana de 1866. Para culminar la unificación de Alemania, Bismark considera que debe aplastar Francia; la guerra franco-prusiana estalla en 1870. Es durante este conflicto que el Comité Internacional crea la primera Agencia de Informaciones sobre la suerte que han corrido militares heridos o capturados, información destinada a sus familias. Otro conflicto, la guerra de Oriente (1875-1878) llevó a los delegados del Comité Internacional hasta los Balcanes, adonde retornaron con ocasión de la guerra serbo-búlgara (1885) y nuevamente durante las guerras balcánicas (1912-1913).

Durante todo este período, el CICR sigue siendo el principal motor del desarrollo del derecho internacional humanitario. Para esta labor, se basa, particularmente, en las experiencias de sus delegados.



 

Fotos

Louis Appia, Guillaume-Henri Dufour, Henry Dunant, Théodore Maunoir, Gustave Moynier. Miembros del Comité de los Cinco, que más tarde se convirtió en el CICR. 

Louis Appia, Guillaume-Henri Dufour, Henry Dunant, Théodore Maunoir, Gustave Moynier. Miembros del Comité de los Cinco, que más tarde se convirtió en el CICR.
© CICR / hist-00113

Guerra serbo-turca, 1878. Ambulancia serbia. 

Guerra serbo-turca, 1878. Ambulancia serbia.
© CICR / hist-00588