Colombia: agua y semillas para la comunidad de Aguas Claras en Caquetá
En la vereda Aguas Claras, ubicada en zona rural del municipio de La Montañita (Caquetá), construimos un sistema de acueducto. Esta obra benefició a 37 familias, que durante años experimentaron múltiples dificultades para el acceso permanente al agua como consecuencia de los conflictos armados. Estas familias debían recorrer largos trayectos y caminos empinados para llevar el líquido a sus hogares.
"El acceso al agua era muy difícil, nos tocaba cargar timbos hasta la poceta; caminábamos aproximadamente 100 metros, pero como el lugar es bien abajo, para subir siempre nos tocaba duro y esa era una tarea diaria", recuerda María Eugenia Canacué Moncaleano, presidenta de la vereda Aguas Claras.
La construcción del sistema de abastecimiento de agua no solo beneficia a la comunidad, sino también a la institución educativa de la zona . "Instalamos dos tanques de 5 mil litros para el suministro de agua a la comunidad y un tanque de 2 mil litros que abastece de agua a la institución educativa de esa vereda; esta obra les permite a las comunidades contar con agua de forma permanente en sus viviendas y en la escuela", explicó Humberto Chávarro, de la Unidad de Agua y Hábitat del CICR en Colombia.
Sin embargo, esta iniciativa no se limita solo al suministro de agua. También aporta al fortalecimiento de la seguridad alimentaria, así como a los saberes y prácticas que tienen estas comunidades para el manejo de los cultivos. "Realizamos una alianza con el Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA, para brindar algunos cursos de capacitación en abonos orgánicos, que posteriormente fueran aplicados a algunos de sus cultivos y a sus huertas y en transformación de derivados lácteos", explicó Luis Oswaldo Mancilla, Responsable Regional de Seguridad Económica del CICR en Colombia.
Adicionalmente, cada una de las 37 familias recibió un kit de herramientas y semillas de tomate, cilantro, cebolla, pepino, lechuga para que pudieran establecer sus huertas caseras.
Con estos insumos, la comunidad tiene la posibilidad de consumir verduras frescas producidas en su propia tierra, con sus propias manos y con algunas prácticas tendientes a hacer un manejo sostenible de los recursos naturales
El desarrollo del sistema de acueducto y las iniciativas complementarias cambiaron de manera significativa las condiciones de vida de esta comunidad. Así lo afirma José Erney Ucué, uno de los beneficiarios: "la vida nos cambió totalmente, ya no tenemos que hacer largas caminatas para obtener agua; consumimos las verduras que cultivamos como la cebolla, el tomate, el cilantro o la lechuga, sin necesidad de incurrir en gastos comprándolas".
También con este proyecto, las mujeres lograron diversificar sus ingresos: "aprendimos a producir arequipe, queso doble crema, yogur y otros productos lácteos, que nos permiten obtener ingresos y aportar a la economía del hogar", señaló Blanca Nieves Peña.
Aguas Claras es hoy un territorio más resiliente y pujante. Estas acciones han impactado positivamente en la calidad de vida de la comunidad, pues les ha contribuido no solo a mejorar su calidad de vida, sino también su seguridad alimentaria y económica.