Prevención de la separación de familiares, búsqueda de personas desaparecidas y reunión de familiares desde 1870
Desde hace 150 años, la Agencia Central de Búsquedas del CICR ayuda a las personas que han sido separadas de sus seres queridos. Los Convenios de Ginebra nos han confiado la función de intermediario neutral para ayudar a las partes y remediar la separación familiar y la desaparición en los conflictos armados.
En situaciones de conflicto o crisis, muchas familias se separan y numerosas personas mueren o desaparecen, lo cual genera sufrimiento e incertidumbre a quienes quedan atrás. El trauma que produce el desconocimiento de la suerte y el paradero de los seres queridos es devastador y puede durar décadas.
Además de ayudar a las personas separadas de sus seres queridos en época de conflicto armado, la Agencia Central de Búsquedas (ACB) coordina los esfuerzos integrales del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja para proteger y restablecer el contacto entre familiares, buscar e identificar a personas desaparecidas, proteger la dignidad de las personas fallecidas y abordar las necesidades de los familiares de las personas desaparecidas.
150 Años de la agencia central de búsqueda Del CicR en Vimeo (en inglés).
"El mundo ha cambiado dramáticamente desde que el CICR empezó las actividades de búsqueda hace 150 años. Lo que no ha cambiado es que la guerra, la violencia, los desastres naturales y los desplazamientos siguen separando familias, causando un inmenso sufrimiento."
Florence Anselmo, jefa de la Agencia Central de Búsqueda
Ayacucho. Regreso de los restos de personas desaparecidas a miembros de la Asociación Nacional de Familiares de Personas Secuestradas, Detenidas y Desaparecidas en Perú.
La cantidad de personas que desaparecen o cuyos cuerpos permanecen sin identificar continúa aumentando en todo el mundo a niveles alarmantes. Solo en 2021, más de 55.000 personas fueron registradas por sus familiares como desaparecidas en el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, con lo que el número actual de personas desaparecidas registradas asciende a 179.000 a principios de 2022.
Esto se debe al incremento de conflictos complejos y prolongados y otras situaciones de violencia, a la gran cantidad de personas que migran a lo largo de rutas que atraviesan varias fronteras y regiones, y a los efectos de los desastres naturales.
En la actualidad, más de 550 expertos –encargados de gestión de casos, especialistas forenses, psicólogos y abogados– trabajan con la ACB en todo el mundo. Trabajan en estrecha cooperación con las 192 Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja que conforman la Red de restablecimiento del contacto entre familiares. De forma conjunta, buscamos a las personas desaparecidas y restablecemos el contacto entre familiares separados a través de las fronteras de Colombia, de Irak a Georgia, y de Filipinas.
Con el propósito de responder a las necesidades de las personas y a los avances tecnológicos que cambian constantemente, la Agencia está experimentando una transformación de cinco años (2020-2025) para reforzar sus actividades principales y adaptarse a los crecientes desafíos. La innovación ha sido uno de los ejes principales de la ACB a lo largo de su historia.
Mediante la adopción y la adaptación de nuevas técnicas digitales y la mejora de la gestión y el análisis de datos, nuestro objetivo es localizar a más personas con mayor rapidez y ayudar a más familiares a mantenerse en contacto.
Por ejemplo, la ACB está aumentando su capacidad de recopilar y analizar grandes cantidades de datos procedentes de fuentes múltiples y dispersas para ofrecer respuestas a los familiares que buscan a sus parientes desaparecidos.
Puebla, Ciudad Serdán. El CICR y la Cruz Roja Mexicana prestan asistencia a migrantes. Joel, un migrante hondureño que estaba trabajando en México, recibe una llamada telefónica gratuita para comunicarse con su familia.</h2>
Otros avances incluyen la ampliación de los medios para que los familiares tengan acceso digital y puedan utilizar los servicios de restablecimiento de contacto, como Trace the Face. La ACB también está tratando de automatizar algunos aspectos de la búsqueda, como el cotejo de nombres y el análisis de patrones migratorios transregionales complejos.
En paralelo, estamos trabajando estrechamente con los Estados para prevenir las desapariciones mediante el registro de personas vulnerables y la creación de oficinas nacionales de información. El fortalecimiento de los sistemas médico-jurídicos es otra prioridad, al igual que el desarrollo de nuestra capacidad de respuesta ante emergencias.
También estamos creando una nueva entidad dentro de la ACB en la que podemos reunir a autoridades, familiares y profesionales para intercambiar buenas prácticas e ideas, generar alianzas para lograr soluciones sostenibles y desarrollar la investigación. Su objetivo principal será proporcionar asesoramiento especializado y apoyar a los Estados y a la amplia comunidad de profesionales para mejorar la prevención y la respuesta. Esta cuestión requiere, más que nunca, comprensión y esfuerzos colectivos.
Al tiempo que la tecnología proporciona modalidades nuevas de conectar a los familiares con sus seres queridos desaparecidos –y las asociaciones multiplicarán sus efectos–, la ACB toma medidas adecuadas para posibilitar el acceso para todos. Las actividades tradicionales, como la recolección y entrega de mensajes de Cruz Roja y las visitas a las personas detenidas, siguen siendo tan importantes hoy como siempre.
Por lo tanto, la ACB mantiene su determinación de conservar el trato personal y humano siempre y cuando sea posible, sobre todo al prestar servicios de restablecimiento del contacto entre familiares.
150 años de la agencia central de búsqueda - testimonios de familias del CicR en Vimeo (en inglés).
En 2020...
Facilitamos 1,1 millón de contactos telefónicos entre familiares.
Entregamos 122.314 mensajes de Cruz Roja.
Reunimos a 4.580 personas con sus familiares.
150 años de búsqueda de personas
El CICR estableció su primera agencia de búsqueda en 1870, durante la guerra franco-prusiana. Creada como la Agencia de Basilea, sirvió como oficina de información y socorros para los prisioneros de guerra.
Durante la Primera Guerra Mundial, la Agencia Internacional de Prisioneros de Guerra contrató a miles de personas –incluso mujeres, por primera vez– para procesar millones de solicitudes de familiares. Después de 1918, la búsqueda se transformó en un servicio permanente, y la agencia obtuvo reconocimiento jurídico en 1929.
Ya durante la Segunda Guerra Mundial, y conocida como Agencia Central de Prisioneros de Guerra, logró procesar 37 millones de fichas de información con la asistencia de computadoras, radio y otras tecnologías. Establecida por los Convenios de Ginebra de 1949, la agencia continuó trabajando con casos relacionados con las guerras mundiales. Además, llevó a cabo investigaciones y creó delegaciones para responder a las nuevas crisis de la segunda mitad del siglo XX.
En 1960, se convirtió en la Agencia Central de Búsquedas. Desde entonces, la ACB es parte integral de los esfuerzos del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja a nivel mundial para proteger los vínculos familiares, mantener el contacto entre familiares separados, buscar e identificar personas desaparecidas, proteger la dignidad de las personas fallecidas y atender las necesidades de sus familiares.
Recursos y contactos:
The Central Tracing Agency: Reconnecting, reuniting, resolving – now and into the future
Vídeo: What is the CTA
Sitio web Family Links
Twitter de la jefa de la División de la Agencia Central de Búsquedas: @AnselmoFlorence
gva_cta_office_Mailbox@icrc.org.